Cheptegei, en una imagen de archivo entrenando en Uganda / Instagram
Joshua Cheptegei será una de las grandes atracciones del próximo 3 de diciembre en el Maratón de Valencia. El ugandés, campeón olímpico de 5.000 y plusmarquista mundial de 10.000, hará su debut en los 42,195 kilómetros en la Ciudad del Turia. Tal y como explicó a este medio el seleccionador de élite Marc Roig, “desde principios de año las conversaciones con Joshua estaban en pie. Tanto a nosotros como a ellos nos encajó. En enero-febrero estábamos hablando muy seriamente”. Valencia estuvo hábil y Joshua apreció la rapidez y las condiciones y el pedigrí del circuito para estrenarse en la distancia.
En un encuentro reciente con medios españoles, el ugandés explicó que “esta es una empresa nueva para mí. Cumpliré 10 años corriendo a nivel internacional y esta es una nueva empresa en la que estoy entusiasmado. Después del Mundial volví a mi país a descansar. Tuve algunos problemas con los clavos, pero después ya he hecho tiradas largas… El maratón es algo nuevo para mí y hay mucho que aprender”.
Cheptegei no ha apostado en su preparación por mucho volumen semanal. De hecho, ha ido haciendo semanas de 140 a 160 kilómetros. No se marca objetivos de tiempos ni quiere lanzar muchas campanas al vuelo. Ya llegará el momento de picar muy alto. Aunque también cabe la posibilidad de que se esté guardando y luego realice una exhibición, quien sabe.
Contrasta el kilometraje semanal del ugandés con el del flamante plusmarquista mundial Kelvin Kiptum. Él, junto a su entrenador Gervais Hakizimana, planificaron semanas de hasta 300 kilómetros para llegar al 100% a Berlín. Cuestión de métodos…
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Además de ser una cuestión de métodos creo que saltar de 5 y 10 mil al maratón debe ser una transición controlada, ya tendrá su tiempo de apostar por esas semanas largas cuando este más acostumbrado a la distancia. Recuerdo que, a nivel amateur, cuando competía en los 5k, mi preparación era muy "ligera" a nivel de kilometraje según algunos expertos, después intenté prepararme bajo las ordenes de quien en aquel tiempo fuera el entrenador de la selección mexicana de triatlón, especializado en atletismo, las rutinas eran extensas y las semanas muy exigentes, tras muchos intentos, pude notar que mis tiempos en competencia eran similares a los que manejaba yo con cargas mucho menores, terminaba las semanas cansado pero sin fatiga extrema, así que cada chango elija su banana :)