El sábado Bruno Hortelano realizó 20,47 en un test de 200 metros él solo, que es una gran marca incluyendo tiempo de reacción, medido con células eléctricas y saliendo de tacos.
A pesar de correr sin rivales y con viento en contra en la curva, Bruno demostró que vuelve a estar competitivo.
El 7 de julio julio corrió un 400 en La Nucía. Aunque la marca obtenida de 46.29 no lo refleja, su paso por el 300 en 32.4, considerando que el récord de España al aire libre es 32.56, demostró que tras sus problemas de salud volvió a sentirse competitivo.
Con esos tiempos, Bruno Hortelano podía haber intentado su clasificación para los JJOO. Pero no ha sido así.
Ha pasado otra temporada más en su carrera. Ya tiene 32 años (en septiembre cumplirá 33) y echamos de menos volverle a ver al nivel de los JJOO de Río 2016, del Europeo de Berlín de 2018 o del Mundial de pista cubierta de Belgrado de 2022.
Pero lo más importante es que Bruno está en paz consigo mismo. “No considero que, en ningún momento, he perdido el tiempo, ni en los últimos años que no he estado compitiendo a mi nivel”, declaró el año pasado en una entrevista . “Ha sido todo aprendizaje y me siento con más conocimiento que nunca. Eso para mí es algo muy positivo. El objetivo es mejorar y mejorar”.
