Nahuel Molina fue este verano uno de esos fichajes que el Atlético de Madrid ha filtrado incansablemente durante semanas antes de que sea oficial. Cuando el club rojiblanco hizo oficial la contratación del lateral, todo el mundo sabía ya que el Metropolitano iba a ser su siguiente destino. La diferencia con anteriores incorporaciones (y las que vendrán), es que ni siquiera fue el club el que le dio rango de oficialidad.

El oasis qatarí de Nahuel Molina y Rodrigo De Paul (leer noticia)