Lo de Diego Godín demuestra que no se debe dar nunca a ningún jugador por acabado. En Uruguay, todos dudaban de él. Todos, menos Diego Alonso, su seleccionador. Y es que a sus 36 años (y 281 días) no solo se marcó un auténtico partidazo, sino que también batió un récord: convertirse en el uruguayo más veterano en jugar un Mundial.

El récord de Godín que maravilla a Uruguay (leer noticia)