Carlo Ancelotti sabe que esta temporada, más que en otras si cabe, será el chivo expiatorio de todo lo que suceda en el Real Madrid. De todo lo malo. El italiano, que a final de temporada emprenderá la excitante experiencia de convertirse en el seleccionador de Brasil, ya está amortizado para el club blanco. Florentino Pérez tiene un año para elegir su sustituto y deshojar la margarita entre Raúl, al que no termina de tenerla mucha fe; un Xabi Alonso al que habría que desalojar de Leverkusen; o incluso rescatar a un Zinedine Zidane que siempre le ha dado buen resultado.

Ancelotti enseña los 'cromos' a Florentino Pérez para mostrar los desequilibrios en el Real Madrid (leer noticia)