Nadó y guardó la ropa el Southampton. Una jugada a balón parado en el primer minuto le bastó ante el Liverpool. De hecho, una falta que no debía suponer un gran peligro. Pero Alexander-Arnold falló y su error le costó una derrota a los ‘red’ que aprieta la Premier de lo lindo. Sólo cuatro puntos de distancia entre el primero y el séptimo. Mantienen el liderato los de Klopp, pero el margen que tenían se ha diluido como un azucarillo.

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