No imperó la brillantez, más bien lo hicieron el oficio y la paciencia. Y, a partir de ahí, dado es el nivel de esta España campeona del mundo, dos chispazos de imaginación aportaron el lustre para que la selección arrancara los Juegos Olímpicos con victoria (2-1). Presente en ambos goles Aitana, primero como ejecutora de la clarividencia de Athenea, después como asistente de Mariona, el triunfo, por el formato del torneo, prácticamente clasifica a la selección para cuartos de final. Y eso que los Juegos ni siquiera han empezado de manera oficial.

España tira de oficio y paciencia para arrancar los Juegos con una remontada (leer noticia)