Las manifestaciones antigubernamentales en Bangladesh han dejado alrededor de 250 muertos y la primera ministra del país asiático ha anunciado su dimisión. El día más sangriento hasta ahora ha sido este domingo, con 91 muertos. Las protestas se originaron contra el sistema de cuotas en las plazas de funcionarios, ya que el 30% se reservaba a los familiares de veteranos que lucharon en la guerra de independencia contra Pakistán. El Tribunal Supremo, con las calles en llamas, recortó aquella cifra hasta el 5%. Era ya tarde, porque los manifestantes ahora exigen la dimisión del Ejecutivo, castigos por los cientos de muertos y la liberación de los detenidos. La primera ministra, Sheik Hasina, ha dimitido y ha huido del país después de que los líderes de los movimientos se negaran a reunirse con ella. Además, se ha suspendido Internet casi por completo, así como los trenes y autobuses de largo recorrido.