Tras haber mostrado una pésima imagen contra Italia, cayendo 1-3 a pesar de haberse puesto en ventaja pronto, a Francia le correspondía mejorar sus prestaciones en la Nations League recibiendo a Bélgica. Y respondió al llamado, aunque para ello no requiriera la intervención de su máxima figura. Kylian Mbappé miró desde el banquillo cómo los galos vencieron 2-0 al cuadro de Domenico Tedesco gracias a los tantos de Kolo Muani y Ousmane Dembélé.

Francia desarma a Bélgica sin necesidad de Mbappé (leer noticia)