Esmee Brugts (28 de julio de 2003, Heinenoord, Países Bajos) es tímida y prefiere pasar desapercibida, siempre alejada de los focos. Es más de hablar en el campo. Su rostro y sus expresiones cuando toma la palabra transmiten esa inocencia de las más jóvenes que empiezan en la élite -solo tiene veinte años y es la primera vez que abandona su país para jugar en la élite europea- que se transforma cuando pisa el verde.

Esmee Brugts: "Lo tuve claro de inmediato, era el Barça" (leer noticia)