La Eurocopa es un torneo donde el margen de error es ínfimo. España quemó uno de sus comodines con su empate frente a Suecia y este sábado frente a Polonia debe ganar para no llegar a una última jornada el miércoles en la que tenga que estar pendiente tanto del terreno de juego como de la calculadora frente a Eslovaquia.

España y Polonia se la juegan muy pronto en la Eurocopa (leer noticia)