Nadal, a por el undécimo título

No piensa ni un solo instante en los puntos que puede dejar de sumar, ni tampoco en los posibles rivales que podría tener en este competido Barcelona Open Banc Sabadell. Rafa Nadal solo tiene en su mente el duelo de hoy en el tercer turno del día ante Roberto Carballés, que ayer venció en primera ronda al austríaco Andreas Haider-Maurer. El manacorí se estrena en esta 66º edición del torneo y lo hará en la pista que lleva su nombre. Busca conseguir su undécimo trofeo en su club e igualar la marca que él mismo consiguió la pasada semana en Montecarlo. Un registro de escándalo. Como lo es el hecho de que en sus 13 participaciones en el torneo de la Ciudad Condal no ha cedido nunca un set en su debut.

Las sensaciones del balear están siendo muy positivas desde su regreso a la competición, los entrenamientos están siendo de alto nivel y todos coinciden en señalar que Rafa es el claro favorito al título. Es cierto que tiene uno de los cuadros más difíciles que se recuerda en Barcelona, pero si algo posee el número uno es la capacidad de lograr lo imposible. Siempre desde la humildad que caracteriza al balear.

Carballés, 'afortunado'

El tinerfeño, granadino de adopción, admitió ayer que jugar contra Nadal es un verdadero honor y que será un duelo muy complicado por el estilo del juego del actual campeón del torneo. “Es el mejor de la historia en tierra. Está muy acostumbrado a jugar mucho en esta superficie, le mete una intensidad muy alta a todos los puntos y siempre te hace jugar al máximo. Creo que eso es lo que marca la diferencia con el resto”, destacó Carballés durante la rueda de prensa posterior a su triunfo en primera ronda.

Llega el esperado debut de Nadal en Barcelona, su propia ‘casa’. Sumar un nuevo título en la segunda parada de la gira sobre tierra batida le daría, todavía más, confianza para afrontar las citas de Madrid, Roma y París. Exigente mes y medio de competición por delante que afronta con la tranquilidad de haber conseguido alcanzar todos sus objetivos. Partido a partido, Rafa no mira más allá de su duelo de hoy sobre el polvo de ladrillo barcelonés. No quiere saber nada sobre puntos y méritos porque su único objetivo es jugar y ganar.