Nadal regresa por la puerta grande

El tenista balear se impuso en un gran partido a Thiem en su vuelta a la competición 349 días después (7-5 / 6-1)

349 días después de su último partido, el balear mostró un nivel espectacular para avanzar a segunda ronda de Brisbane

El tenista de Manacor ha vuelto a lo grande tras vencer por la vía rápida a Thiem (2-0)

@TennisTV

Albert Briva

Albert Briva

Como si nada hubiera pasado regresó Rafa Nadal a la competición 349 días después. Avisaban los compañeros que habían tenido el placer de entrenar con él en estas últimas semanas que el nivel del tenista balear no era ni por asomo el de alguien que llevaba un año sin competir.

Y dicho y hecho. Ante Thiem, Nadal regresó a lo grande. En un partido que no hace tantos años era toda una final de Grand Slam, el de Manacor impuso su tenis, su ritmo y sus golpes ganadores. Cierto es que el nivel del austríaco fue de más a menos claramente, pero no hubo un solo momento en el que Nadal mostrará falta de ritmo.

Empezó el partido con dominio claro para los servicios y sin apenas posibilidad de respuesta en el resto para ninguno de los dos. Sólido y empezando a carburar la derecha se mostraba Nadal que ya daba simpatomas de estar muy cómodo, hasta tal punto que no fue hasta en el quinto juego con su servicio cuando Thiem fue capaz de ganarle dos puntos en el mismo turno de saque.

Parecía que era el momento en el que el austríaco iba a poner una marcha más al partido, pero generó el efecto contrario. El acelerón de Thiem provocó la reacción de Nadal que a partir de entonces se adueñó totalmente del partido y en el duodécimo juego de la primera manga lo rompió. Consiguió las primeras bolas de rotura del partido y pese a desaprovechar las tres primeras, se apuntó la cuarta y definitiva para adelantarse en el marcador.

Supo resistir Nadal en los mejores momentos de Thiem y apretar cuando lo requería el partido, mostrando una vez más que el talento y la clase no se pierden por mucho tiempo que pueda estar parado. Y asimismo lo hizo también en el segundo set.

Aprovechó el bajón físico y mental del austríaco tras ceder el primer set para seguir imponiendo su ley y ya a las primeras de cambio tomó el mando del set. Rompió en el segundo juego sin dar opción alguna a su rival para voltear la situación.

Intentó cambiar el signo del partido Thiem apretando desde el resto en la que era ya su última vida. Pero una vez más, Nadal sacó a relucir su heroica capacidad de resistencia para hacer añicos las esperanzas de un Thiem que terminó por hundirse. Sacó adelante Nadal su servicio más complicado antes de volver a romper y apuntarse una ventaja ya insalvable que cerraría con un aplastante 6-1 final.

Nadal ha vuelto y lo ha hecho a lo grande. Sin dudas ni en el físico ni el nivel. El local Jason Kubler espera en segunda ronda, que tras aprovecharse de la retirada del ruso Karatsev cuando el partido estaba empatado a un set, se medirá por primera vez en su carrera a Nadal.

Será la segunda prueba para el balear, que sin desistir a nada en Brisbane, ya mira de reojo a un Open de Australia que empezará el próximo 14 de enero y al que si nada se tuerce llegará con la mejor de las sensaciones.