¿Quién para a Jannik Sinner?

Que Jannik Sinner es el jugador más en forma del circuito ATP es un hecho. El tenista italiano se llevó el torneo de Rotterdam este pasado domingo tras vencer a Álex de Miñaur en la final. Un inicio de temporada prácticamente perfecto para el de San Candido, después de conseguir su primer Grand Slam el pasado mes de enero.

Sinner, el tenista de San Candido que se ha ganado el corazón de los italianos

Viendo el nivel que está demostrando estos últimos meses, es impensable imaginarse a Sinner fuera del podio mundial. El italiano ha superado a Medvedev en el ranking y ya mira hacia Carlos Alcaraz, al que no tiene tan lejos. Una segunda plaza que tiene que proteger el español en estos próximos torneos, donde defiende muchos puntos.

Sinner está a un nivel formidable. En los últimos cuatro partidos frente a Novak Djokovic, actual número uno del mundo, ha ganado tres y ha ido creciendo su fama entre el aficionado del tenis y del deporte.

Y es que el joven tenista no ha parado de mejorar. Con un juego rápido, un saque muy preciso y unos golpes difíciles de contrarrestar, el historial del italiano esta temporada es de solo victorias. En concreto, son 12 los partidos que ha disputado y 12 en los que ganado.

Su paso por tierra batida es una de las incógnitas del año. Sinner ha demostrado que la pista dura es su fuerte y la superficie en la que puede explotar su estilo de juego. Aun así, en anteriores años se le ha visto más vulnerable compitiendo en polvo de ladrillo. Hasta abril no llegará la temporada preferida de Rafa Nadal.

De hecho, un dato curioso es que el italiano, de los 12 títulos que ha ganado en toda su carrera, 11 han sido en pista dura. Tan solo se ha llevado un torneo en tierra batida: fue en Umag en 2022, venciendo precisamente a Carlos Alcaraz en tres sets.

¿El próximo número uno?

Una de las preguntas que se hace el aficionado viendo estos últimos meses de tenis es si Sinner es firme candidato a alcanzar el número uno este año. Todo dependerá de cómo se recupera Alcaraz del bajón en este inicio de temporada y del nivel al que compite Novak Djokovic en los próximos torneos. Lo que está claro es que fácil no será ni mucho menos.