Canarias

Tres playas de Gran Canaria cerradas al baño por la presencia de tiburón

Las autoridades prohibieron el baño tras avistar, al menos, un escualo cerca de la costa

Playa de Telde (Gran Canaria)

Playa de Telde (Gran Canaria)

Redacción

La alarma saltó el sábado por la tarde, cuando el reloj marcaba aproximadamente las 17.30 horas, en Telde (Gran Canaria). Los profesionales de salvamento responsables de garantizar la seguridad en la playa de Melenara avistaron un animal, de gran tamaño y compatible con un tiburón, en una zona próxima a la costa. De inmediato, prohibieron el baño por prevención. En las aguas se hicieron rastreos con motos pero no fue hasta tres horas más tarde cuando la presencia del escualo se confirmó a pocos metros de la orilla. Este domingo, la escena se repitió –a las pocas horas de reabrir la playa al baño– y las banderas rojas se izaron en Melenara, Salinetas e, incluso, San Agustín.

El primero de los ejemplares –del que todavía se desconoce la especie aunque podría ser un martillo– se localizó este sábado en la costa de Telde, provocando la psicosis entre los bañistas de Melenara. Hasta la zona se desplazaron Policía Local, Protección Civil y Pro-Activa Canarias (empresa de socorristas responsable en este enclave y que fue la que dio la orden a los bañistas de salir del agua) que detectaron un tiburón de entre dos y tres metros de largo.

La Policía, mediante la unidad de drones, y los profesionales de salvamento con motos de agua realizaron un rastreo para localizar al animal. Durante toda la mañana de este domingo, no se dejó ver, motivo por el que pensaron que había abandonado esa zona de costa. Melenara reabrió, a las 10 horas, al baño. Pero la tranquilidad duró poco y tres horas después se descubrió de nuevo su presencia gracias a los drones. Lo que se desconoce, por ahora, es si se trata del mismo ejemplar visto el día anterior.

Las concejalías de Playas y Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Telde decidieron cerrar nuevamente el litoral, una medida que de forma temporal se extendió también a Salinetas para evitar incidente alguno.

Durante toda la jornada, Policía Local, Protección Civil y Pro-Activa trabajaron de manera coordinada para supervisar las labores de rastreo en el litoral. Pasadas las 17 horas la alerta volvió a encenderse al vislumbrar desde el dron, esta vez con toda la claridad posible, un tiburón martillo. 

Pero antes, a las 15 horas, la alarma saltó en San Bartolomé de Tirajana. En la zona del Balcón de San Agustín se atisbó un ejemplar, un hecho corroborado por el personal de Cruz Roja, que inmediatamente dio la orden de cerrar la playa, una medida que estuvo activa durante todo el día aunque, pese a las tareas de monitorización, no volvió a detectarse el animal. Por ahora no se sabe si es el mismo que el visto en Telde.

Desde el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana garantizan la seguridad en la playa y afirman que este lunes volverá a abrir en condiciones habituales para los usuarios. Recuerdan desde el consistorio que todos los años hay alertas de avistamiento y piden no caer en la psicosis ni en el alarmismo.

Coincide con este extremo el licenciado en Ciencias del Mar, Vicente Benítez Cabrera. «Cada vez es más habitual en verano ver tiburones. Los animales se acercan a la costa, sobre todo, en zonas donde hay jaulas de cultivo marino y alrededor hay pescado», explica el experto. Melenara es una de esas. «Otras veces se acercan la orilla porque hay bancos de sardinillas o algún otro pez. Llaman la atención, pero no hay que sembrar el pánico. Las películas han hecho mucho daño...», insiste Benítez Cabrera.

El especialista recuerda que no hay documentado ningún caso en Canarias en que los tiburones de las aguas del Archipiélago hayan atacado a una persona. «Hace unos años un surfista en Fuerteventura sufrió una mordedura en el talón, pero no se pudo demostrar que fuese un tiburón», recuerda, al tiempo que pide tranquilidad. «Por precaución, los ayuntamientos hacen bien en cerrar, pero nunca ha habido incidentes con bañistas», subraya.

En el momento de escribir estas líneas, las playas continuaban cerradas. Este lunes, desde primera hora, se acometerán labores de rastreo en las aguas por si se volviese a detectar la presencia de los escualos y, una vez esclarecido, se decidirá si el baño vuelve a estar permitido.