DESAPARECIDA EN SONSECA (TOLEDO)

Marina se fue sin decir adiós, ni siquiera a su madre: "Solo quiero saber que mi hija está bien"

La joven dejó su ropa, su móvil y a sus dos perros, de los que no se separaba. Su familia no tiene ninguna pista de su paradero

Toma medicación para la depresión. La muerte de sus abuelos, a los que estaba muy unida, le había afectado mucho

Cartel de búsqueda de Marina, desaparecida en Sonseca (Toledo).

Cartel de búsqueda de Marina, desaparecida en Sonseca (Toledo). / SOS DESAPARECIDOS

Esteban Alarcón

Marina lleva más de 20 días en paradero desconocido. Tiene 27 años, es de complexión delgada, pelo oscuro, ojos marrones y tiene un piercing en la nariz. Así describe su perfil la Asociación SOS Desaparecidos en el cartel que se ha difundido para su búsqueda.

Lleva publicado desde el día 21 de agosto, fecha en que su madre, Maricarmen, denuncia su desaparición ante la policía. Llevaba sin contactar con ella desde el día 16, cuando recibió sus últimos mensajes por WhatsApp, según ha contado al canal de sucesos e investigación de Prensa Ibérica.

"Se ha ido con lo puesto"

"Me preguntó qué tal estaba, porque tenía un resfriado. Le pregunté yo qué tal, me dijo que bien y ahí se acaba la comunicación", afirma una madre angustiada. Marina vivía con su supuesta pareja y los padres de este en Sonseca, un pueblo de Toledo de 11.000 habitantes.

Ajofrín tiene poco más de 2.000. En este otro pueblo, a siete minutos en coche de donde vivía su hija, tiene Maricarmen su casa. Hogar de las dos hasta hace tres meses. Allí ha vivido Marina 26 de sus 27 años.

Una de las hermanas del padre y tía de Marina está ayudando a Maricarmen con la búsqueda. "Es ella la que me alerta porque mi hija no le coge el teléfono" relata la madre. "Cuando logro contactar con los padres del chico me dicen que vaya a recoger sus cosas, que se han ido sin decir a dónde. No me quieren dar más pistas".

Marina se ha ido con lo puesto. Ha dejado ropa, el móvil y dos perros de los que no se separaba. "Esto es lo que mas me chocó", señala sorprendida Maricarmen. "Sobre todo, porque no se separaba de una de sus perras ni para dormir. Es muy extraño".

Marina, con uno de sus perros.

Marina, con uno de sus perros. / CEDIDA POR LA FAMILIA

Sin pistas

Marina es animalista y colabora con varias asociaciones haciendo voluntariado. También es hija única. Su madre la tuvo con 21 años y desde siempre estuvieron muy unidas. Sus padres se separaron cuando era muy pequeña y perdió progresivamente relación con su progenitor. Él tampoco sabe dónde está, según confirma a este medio la madre.

"Yo pagaba las facturas de su móvil. Se lo he dado a la Guardia Civil para que pueda investigarlo", acredita. "Tengo miedo de si le ha pasado algo. Solo quiero saber su paradero y saber si está bien".

Las pistas son confusas y escasas. "Ha habido bulos de gente del pueblo que no te puedes creer y que nos han llevado a puntos sin retorno". Su madre cuenta orgullosa que a Marina la conoce mucha gente: "tiene estudios de informática y de administrativa. Hasta que no se sacó los estudios de geriatría no paró, porque le encanta trabajar con gente mayor".

De hecho, trabajó en varias residencias de ancianos. "Es muy expresiva y una niña encantadora. Se lleva bien con todos. Se gana a los ancianos y la quieren mucho", destaca su madre.

Mayka, en compañía de su hija.

Marina, en compañía de su madre. / CEDIDA POR LA FAMILIA

"Cuadros de depresión"

Marina se estaba medicando. "Tenía episodios de depresión desde la muerte de sus abuelos maternos durante la pandemia del covid. Estaba muy unida a ellos". Sus dos antebrazos están decorados con dos tatuajes, uno de una rosa por su abuela y otro de una pluma por su abuelo.

Preguntada si ha contactado con conocidos que puedan ofrecer alguna pista, Maricarmen ha hablado con un amigo suyo de la infancia "con el que siempre ha estado". "Estuvieron trabajando juntos hasta hace poco. Pero tampoco sabe nada. Ha intentado decirle algo a través de Instagram sin resultado".

"Yo iba cada diez días a verla al pueblo. Cuando era adolescente nos distanciamos, pero nada que no sea normal en ciertas edades", cuenta su madre. "Al chico con el que supuestamente se ha ido lo conoce a través de Instagram y empiezan a salir muy rápido. Llevaban desde mayo viviendo juntos en casa de sus padres. A mí no me parece bien e intento advertirla. No sirve de nada", se lamenta Maricarmen.

Está desesperada. "Me he tenido que dar de baja de mi trabajo porque tengo ansiedad. Solo quiero saber de ella". Los días pasan y no hay noticias. "La policía sigue investigando". Este medio ha intentado contactar con Marina a través de sus redes sociales, pero no ha obtenido respuesta.