Celebraciones navideñas

Los temas de conversación que hay que evitar en la cena de Navidad

Para evitar que discutas con tus compañeros, amigos o familiares, te planteamos una guía para no meterte en problemas

Qué temas de conversación hay que evitar en la cena de Navidad.

Qué temas de conversación hay que evitar en la cena de Navidad. / Shutterstock

José Luis Escudero

La Navidad está a la vuelta de la esquina, y con su llegada es tiempo de las tradicionales cenas en las que disfrutar con nuestros grupos sociales más cercanos. Primero, en las tradicionales cenas de empresa con los compañeros, después en Nochebuena y Nochevieja con la familia, y ocasionalmente, juntándonos con grupos de amigos a los que hace tiempo que no vemos. Sin embargo, lo que deberían ser unas fechas de afecto y unión, en ocasiones se torna en conflicto, cuando surgen rencillas y discusiones.

Bien sea en el encuentro con tus colegas de trabajo, o en la visita de tus cuñados, primos o suegros, hay una serie de temas de conversación que es preferible evitar si no se quiere que las celebraciones se tornen en drama, para disgusto de aquellos con más espíritu navideño, u organizadores de la reunión.

Toma nota de la siguiente lista y haz tus mejores propósitos para contribuir a que todas las citas navideñas sean un éxito y reine en ellas la paz y armonía propia de estas fiestas.

Pandemia y vacunas

Quizá sea el tema estrella de estos últimos dos años. Sin embargo, la sociedad ya está agotada y con ello surgen cada vez más tensiones. Sí, la ciencia respalda inequívocamente las barreras de protección que todos conocemos (vacunas, mascarillas...) pero no todo el mundo acepta estas medidas, y es ahí donde surgen las rencillas. ¿Tienes un cuñado antivacunas? ¿Tu sobrino no se pone la mascarilla? Trata de llevarlo con filosofía, pon todo de tu parte para evitar contagios (ventilando bien la estancia, por ejemplo) y no piques a aquellos con distinta opinión que tú.

Trabajo

Las fiestas navideñas son un momento para la distensión y para dejar atrás, en la medida de lo que cada uno pueda, las obligaciones profesionales. Incluso en las típicas cenas navideñas con tus compañeros, trata de dejar atrás los problemas de la oficina y disfrutar de una velada agradable, sin dificultades ni tareas en mente. Y con la familia, puedes intentar no trasladar excesivamente tus complicaciones profesionales, dado que difícilmente podrán ayudarte con ellas y enturbiarán el clima de cualquier reunión.

Preguntas incómodas

¿Para cuándo la boda? ¿Y los niños, qué? ¿Has engordado/adelgazado? Todos hemos escuchado algunas de estas preguntas en cualquier tipo de reunión social, especialmente con familiares o personas a las que no vemos habitualmente. Sin embargo, estas cuestiones pueden hacer sentir molesto al receptor, que verá cuestionado su presente y su realidad vital por alguien que puede desconocer el contexto de sus decisiones o circunstancias. Sé respetuoso y empático, trata de no molestar a nadie y comprende que todos los estilos de vida son válidos y respetables.

Tendencias políticas

En este mundo es imposible que todos tengamos una concepción similar de la realidad. En la política, eso se traduce muchas veces en encendidos debates. El clima actual en este país no es especialmente favorable al respecto. Sin embargo, piensa que todos tienen derecho a pensar a su manera. ¿No te parecen bien las ideas de Podemos? ¿Crees que Vox es intolerante? ¿Consideras que el Gobierno de Pedro Sánchez se está equivocando en sus decisiones? ¿Estás harto de los casos de corrupción en el PP? ¿Prefieres la república a la actual monarquía, o crees que el sistema actual es el correcto? Probablemente tengas motivos para pensar como piensas, pero a tu cena navideña no le hará bien que trates de imponer tus ideas al resto. Y si te entra la tentación... piénsatelo dos veces.

Debate lingüístico

Es otra de las polémicas sociales avivadas durante las últimas semanas, debido al uso del catalán y el castellano en las aulas. Sin embargo, tanto dentro como fuera de esta comunidad autónoma existen distintas sensibilidades al respecto, todas ellas respetables. Bien seas partidario de la diversidad lingüística o de la uniformidad en todo el territorio nacional, no trates de imponer tu visión al resto e intenta comprender las distintas posibilidades del asunto.

Preferencias alimenticias

¿Tienes un cuñado vegano? ¿O una sobrina que come en pequeñas cantidades? ¿Tu suegro comete excesos gastronómicos? ¿Hay en tu familia concebollistas y sincebollistas? Respeta. Cada uno es libre de tomar sus propias decisiones. Todo es respetable. Incluso, en casos extremos que desembocan en problemas de salud, estos difícilmente se resolverán en una cena navideña, sino acudiendo a profesionales con máximo conocimiento de cómo tratar la situación. Disfruta de la cena, deja que cada uno coma lo que prefiera y renuncie a aquello que no le guste.