Cáncer de piel

Sanidad trabaja para poner orden en la medida de los fotoprotectores en plena ofensiva del bulo del 'callo solar'

La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios estudia modificar la normativa europea y hacer frente "a la variabilidad" en la medida del Factor de Protección Solar

Turistas en las playas de Lloret de Mar, Girona.

Turistas en las playas de Lloret de Mar, Girona. / Marc Martí

Nieves Salinas

La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) trabaja para modificar la normativa europea y hacer frente "a la variabilidad" en la medida del Factor de Protección Solar (FPS o SPF, por sus siglas en inglés), la de los protectores solares. En plena ofensiva de los negacionistas, que mueven por redes el bulo del llamado 'callo solar', la Agencia centra sus "recursos y esfuerzos" en adaptar el marco legal al avance del conocimiento científico y técnico, que permita, entre otras cosas, disponer de un "método de medida robusto" que refuerce "la confianza de la ciudadanía y la industria hacia los productos solares".

La AEMPS desarrolla de "manera continua" diferentes actividades de control de mercado y de cosmetovigilancia para garantizar que los protectores solares cumplan con los requisitos de calidad, seguridad y eficacia. Por ejemplo, a comienzos de junio, el organismo supo, a través de un estudio realizado por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), sobre supuestos incumplimientos en el etiquetado de siete protectores solares.

Solicitó entonces a las empresas implicadas que proporcionasen los ensayos que sustentasen las reivindicaciones del FPS y el FP-UVA, realizados conforme a los métodos oficiales. Hace apenas unos días actualizaba la información y añadía a la lista una nueva empresa que se suma al listado de fabricantes que han facilitado estudios adicionales para demostrar que sus productos cumplen con lo reivindicado en el etiquetado.

Ensayo de los FPS

A las agencias les toca supervisar el cumplimiento de la legislación realizando ese control del mercado. Actualmente, para determinar el factor de protección solar y el factor de protección ultravioleta-A (FP-UVA), hay tres métodos oficiales: la determinación 'in vivo' del FPS (UNE EN ISO 24444); la determinación 'in vitro' de la protección UVA (UNE EN ISO 24443) e 'in vivo' de la protección UVA (UNE EN ISO 24442).

El ensayo de los factores de protección solar se limita al área de la espalda de personas seleccionadas

LA AEMPS aclara a El Periódico de España, del mismo grupo editorial, que el método normalizado internacional para el ensayo del FPS en protectores solares es la norma técnica 'ISO 24444 Métodos de ensayo de protección solar. Determinación in vivo del SPF'.

Utiliza un simulador solar constituido por una lámpara de arco de xenón (o un dispositivo equivalente), de salida definida y conocida, para determinar la protección que proporcionan los productos sobre la piel contra el eritema inducido por los rayos ultravioletas solares. El ensayo se limita al área de la espalda de personas seleccionadas.

A nivel internacional

Una parte de la piel de cada sujeto, clarifica la AEMPS, se expone a la luz ultravioleta sin ninguna protección y otra parte (diferente) se expone después de la aplicación del protector solar que se somete a ensayo. Para la validación del método, otra parte distinta de las anteriores se expone a la luz ultravioleta después de la aplicación de un protector solar que tiene un FPS de referencia.

La Agencia indica que, en los últimos años, se ha observado "una cierta variabilidad" en la aplicación de la norma técnica UNE EN ISO 24444, la cual dificulta la "reproducibilidad deseable para medir de manera precisa el FPS de los protectores solares". Esto ha sido expuesto por la AEMPS en distintos foros oficiales a nivel europeo e internacional, abriendo el debate sobre la necesidad de reforzar el método.

Proteger a los niños

Esta misma semana, la AEMPS ha lanzado la campaña 'Consejos para una adecuada protección solar en niños' en colaboración con el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 y con la Fundación Piel Sana de la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV).

Son una serie de consejos con información para protegerse adecuadamente, y evitar los daños que la exposición solar puede ocasionar en nuestra salud: quemaduras, manchas, alergias solares, reacciones fototóxicas, lesiones oculares, fotoenvejecimiento a largo plazo o el aumento de la incidencia de cáncer de piel.

En la campaña, la Agencia desglosa la categoría de protectores solares que existen: protección baja, productos con valores de 6 y 10 de SPF; media, productos con valores de 15, 20 y 25 de SPF; alta, productos con valores de 30 y 50 y muy alta, productos con valores de 50+ de SPF.

Rigor científico

Stanpa, la Asociación Nacional de Perfumería y Cosmética, pedía hace apenas unos días mayor rigor científico y la consulta de fuentes acreditadas a la hora de informar sobre la fotoprotección. Lo hace en un momento en el que bulos como el del 'callo solar' -tomar el sol a pelo, sin ninguna protección- se extienden como la pólvora en redes, alentados por personajes muy conocidos.

En el encuentro, participaron algunas expertas que lideran las áreas científicas de distintos fabricantes, encargadas de supervisar desde la formulación hasta la salida al mercado de los fotoprotectores, un proceso que sigue unos exhaustivos controles de evaluación de garantía y calidad regulados a nivel europeo.

Protectores solares.

Protectores solares. / .

Destacaban que la seguridad de los filtros solares está avalada por el Reglamento Cosmético Europeo y el Comité Científico para la Seguridad de los Consumidores (SCCS, por sus siglas en inglés). Esta regulación reta a los expertos en el proceso de formulación de los fotoprotectores. Un proceso complejo, describen, cuya etapa de investigación previa a su materialización puede llegar a extenderse hasta 10 años.

De hecho, antes de llegar al producto final, hay compañías que pueden llegar a realizar más de 500 prototipos que no solo persiguen la máxima eficacia y calidad del producto, sino que también ponen a prueba su resistencia y aplicabilidad.