Inteligencia artificial

OpenAI reta a Google y lanza su propio buscador web, SearchGPT

Todavía no hay una fecha de lanzamiento y al principio solo será accesible para 10.000 usuarios seleccionados

Una pantalla de OpenAI.

Una pantalla de OpenAI. / EFE

OpenAI planta cara al dominio del buscador de Google. Este jueves, la empresa responsable del asistente conversacional ChatGPT anunció el lanzamiento de su propio motor de búsqueda web, un "prototipo temporal" al que ha apodado SearchGPT.

De forma similar al chatbot de la compañía, esta nueva función se sirve de inteligencia artificial (IA) para dar respuesta a las consultas de los usuarios, ofreciéndoles información, imágenes y enlaces, como hace Google, pero también la posibilidad de repreguntar y mantener una conversación con su buscador.

Además, SearchGPT "recopila" la ubicación de los usuarios y la "comparte" con proveedores de búsquedas de terceros para que los resultados sean más precisos. Por ejemplo, mostrando la previsión meteorológica o una lista de restaurantes cercanos. La compañía asegura que los usuarios podrán establecer que sus resultados no sirvan para entrenar sus modelos de IA generativa.

Por ahora, el buscador de OpenAI es un prototipo que solo será accesible para "un pequeño grupo" de usuarios y editores seleccionados, unas 10.000 personas según ha explicado la start-up al medio especializado The Verge. Esta nueva herramienta cuenta con la colaboración de medios como The Wall Street Journal, The Associated Press, Vox Media o la revista Atlantic.

Competir con Google

Aun así, su anuncio es una declaración de intenciones con la que OpenAI, respaldada económicamente por Microsoft, desafía la hegemonía del buscador de Google, el más popular del mundo. "Creemos que mejorando las capacidades conversacionales de nuestros modelos con información en tiempo real de la web, encontrar lo que buscas puede ser más rápido y fácil", señala la empresa lidrada por Sam Altman en una entrada en su blog corporativo.

Ambos gigantes tecnológicos están enfrentados en su su carrera por el dominio de la IA. Esta competición los ha llevado a integrar la tecnología generativa en las búsquedas web, no sin problemas. El pasado mayo, Google tuvo que pedir perdón después que su nueva función de búsquedas basadas en IA, AI Overviews, cometiese errores peligrosos como recomendar a los usuarios poner pegamento en la pizza. El motor de búsqueda Perplexity, que también recurre a la IA, copió artículos periodísticos sin consentimiento ni atribución. Varios estudios han advertido que la integración de IA en las búsquedas web podría perjudicar el negocio de algunos medios de comunicación.