Pseudoterapias

El negacionismo de Elle McPherson enciende a las pacientes con cáncer de mama: "No había plan B, o quimio o me iba al otro barrio"

La modelo ha rechazado los tratamientos y ha elegido un "enfoque holístico" para tratar su enfermedad, mientras que la comunidad médica alerta de los peligros de estas posturas cada vez más habituales

En España se diagnosticaron alrededor de 35.312 nuevos cánceres de mama en el año 2023

En España se diagnosticaron alrededor de 35.312 nuevos cánceres de mama en el año 2023 / FERRÁN NADEU

Marta Alberca

"Decir 'no' a las soluciones médicas estándares fue lo más difícil que he hecho en mi vida. Pero decir 'no' a mi propio ser interior habría sido aún más difícil". Con estas palabras relata Elle McPherson fundamentaba su negativa a recibir quimioterapia para tratar el cáncer de mama que sufre desde hace siete años. Las reacciones a la postura de la modelo australiana no se han hecho esperar, sobre todo, cuando en países como España, esta patología supone el 28,9% del total de enfermedades oncológicas en las mujeres y la primera causa de muerte por cáncer en nuestro país en ellas, según refleja la infografía sobre 'Cáncer de mama en España' elaborada por la Red Española de Registros de Cáncer (REDECAN) y la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM). 

Si se le pregunta a Verónica Amil (nombre figurado, por deseo de la paciente) se enciende con el tema. Cuando El Periódico de España contacta con ella, diagnosticada de un agresivo cáncer de mama en 2021, en plena pandemia, está leyendo la polémica desatada en redes sociales por el confuso mensaje lanzado por la modelo americana. "Peligrosísimo", exclama. Se remonta al peor momento de su vida, el que marcó un antes y un después, el que, con 50 años, la dejó noqueada.

Sin plan B

"Cuando me lo diagnosticaron, era muy agresivo. No había plan B, o quimio o me iba al otro barrio. No podía elegir. Empecé a la semana siguiente. Afortunadamente, no había metástasis", recuerda Verónica. Fueron seis meses de quimio, cuatro horas a la semana. Luego, una operación y la extirpación y reconstrucción del pecho afectado. Revisiones cada tres meses con los especialistas -siempre con el corazón encogido-; pastillas y un presente lleno de esperanza.

Ser negacionista en un caso así es una locura. Depende de las ganas que tengas de vivir.

Verónica, paciente de mama

Verónica está bien. "No me considero una campeona por superarlo", aclara. Pero pide por favor que no se atienda a "mensajes dañinos" y por eso se presta a hablar: "Es como si a una le dicen: 'O te sometes a un trasplante de corazón, o te mueres'. Ser negacionista en un caso así es una locura. Depende de las ganas que tengas de vivir. No es lo más agradable pasar por una quimio, pero tampoco hacerlo por una operación a vida a muerte. No hay otra opción", insiste.

Le duele, especialmente, que ese mensaje llegue a través de alguien tan notorio, "porque debería tener más sentido común. Hay que creer en la ciencia, en los científicos que se dejan la piel investigando, en los médicos en los que se debe confiar, como yo hice, con los ojos cerrados. Gracias a ellos y a la quimio, yo estoy aquí", zanja.

El beneficio

En el caso puntual de la confesión de la modelo, el doctor Elías López Jiménez, oncólogo radioterapéutico de atención al paciente de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC), señala que no cuentan con demasiada información, pero entiende que le diagnosticaron cáncer de mama localizado y que el oncólogo le propuso un tratamiento de radioterapia que ella rechazó.

"Es una decisión personal que toma la paciente. Pero es importante decir que, cuando el oncólogo propone ese tratamiento, se tiene en cuenta el equilibrio eficacia/tolerancia. Es decir, considera que va a ser eficaz y, sobre todo, que el beneficio es mayor que el riesgo", indica. Hay que ver cada contexto, incide. "No es lo mismo rechazar la quimio como propuesta preventiva, a hacerlo como tratamiento con enfermedad avanzada. Pero cualquiera de las dos cosas pueden ser peligrosas".

Pseudoterapias al alza

"Los peligros que tienen las terapias alternativas es que no son eficaces, no tienen aval científico, y la enfermedad puede progresar. Además, algunas pueden ser nocivas. Ese es el peligro de divulgar esto", señala el médico que, admite, a veces este tipo de pseudoterapias -más ahora con las redes sociales- desaparecen o vuelven a ponerse de moda. Ante cualquier duda, el doctor López Jiménez pide a los pacientes que acudan a recursos como el teléfono de atención continuada, el 900 100 036, con el que cuenta la AECC. Un servicio -único en Europa y el segundo en el mundo que ofrece esta disponibilidad para las personas con cáncer y sus familiares- que está operativo las 24 horas del día, los 365 días del año y de forma gratuita.

El doctor habla del posicionamiento oficial sobre las pseudoterapias de la AECC porque, admite, suelen recibir "muchas consultas" sobre este tipo de terapias alternativas. Según el Ministerio de Sanidad, en España existen 139 pseudoterapias que ya se conocían desde 2011. 73 de ellas no tienen ningún soporte en el conocimiento científico que pueda acreditar su eficacia y seguridad.

Especialmente significativos son los datos aportados en 2019 por un informe del Colegio de Médicos de Barcelona y del Departamento de Salud y el Consejo Audiovisual de Cataluña, tal y como recoge la AECC, se denunció que al hacer la búsqueda "cura y cáncer" en Youtube, el 74% de los 50 primeros resultados podían "considerarse desinformación en relación con la enfermedad, dado que se trata de vídeos que defienden su tratamiento mediante terapias sin base científica reconocida, susceptibles de ser calificadas de falsas, erróneas o engañosas".

"Triste y arriesgado"

Los pacientes oncológicos se enfrentan a una situación de vulnerabilidad e incertidumbre que puede llevarlos a aferrarse a opciones que ofrecen la curación o la mejora de su estado de salud, a pesar de carecer de una evidencia científica que las respalde. De ahí, qué afirmaciones, como las de McPherson explicando que tras someterse a este tipo de tratamiento holístico durante ocho meses en Phoenix (EEUU), su cáncer se encuentra, "en términos tradicionales, en remisión", encienden aún más el debate.

Desde la Federación Española de Cáncer de Mama explican a El Periódico de España, que "a pesar de que las decisiones sobre salud son personales, no se pueden poner en duda la efectividad y avances en investigación y tratamientos para acabar con la enfermedad de una manera segura". 

Una paciente se somete a una prueba

Una paciente se somete a una prueba / EPE

Desde SEOM, su presidente, César Rodríguez, alerta del peligro de que este tipo de mensajes sin fundamento científico lleguen a la población general, "puede trasmitir la idea de que tratamientos con eficacia demostrada, no solo quimioterapia, sino otros como la inmunoterapia o la terapia hormonal, no sirven para nada. Y esto es muy triste, a la vez que arriesgado". Del mismo modo, indica que esto puede hacer que otras mujeres crean este tipo de afirmaciones y las priven de una mayor probabilidad de curación: "La clave está en la selección individualizada de los fármacos y recurrir a otros métodos es realmente preocupante porque pueden provocar otros problemas de salud". 

Elle McPherson no es el primer rostro conocido que opta por abordar el diagnóstico de cáncer desde otra perspectiva. Fue el caso, por ejemplo, de la actriz Olivia Newton-John (amiga de McPherson) o del fundador de Apple Steve Jobs. En ambos casos, el final no es muy alentador.