Preocupan Piqué y un próximo España-Inglaterra en el Bernabéu

La Federación Española de Fútbol está observando atónita la situación que se ha generado alrededor de Gerard Piqué. Su preocupación creció tras los acontecimientos del Carlos Tartiere, que se sumaron a los de León, pero su actividad debe continuar y no puede estar condicionada a comportamientos absurdos del público.

Por ello, la Federación está negociando la disputa de un amistoso en el parón internacional del mes de noviembre ante Inglaterra, con el Bernabéu como posible escenario.

En caso de confirmarse este partido y de seguir la actual espiral, Piqué ya sabe que le esperaría el peor de los ambientes posibles. Los silbidos tienen su origen en los comentarios sobre el Real Madrid y la afición blanca, que presumiblemente sería mayoritaria en el partido, acentuaría los c<strong>apítulos que se han vivido en León y Oviedo</strong>.

Desde el seleccionador español, Vicente del Bosque, a sus compañeros en la selección y el FC Barcelona, como Andrés Iniesta, han salido al paso de estas reacciones contra el defensa central barcelonista y de la selección.

La Federación debe ultimar su planificación y, en primer lugar,  solo puede concretar el partido cuando España ya esté matemáticamente clasificada para la Eurocopa, algo que no puede ocurrir hasta los dos próximos partidos de octubre ante Luxemburgo y Ucrania.

La Roja estará virtualmente en la Eurocopa 2016 de Francia si vence mañana martes en Macedonia ya que sus otros dos rivales, Eslovaquia y Ucrania, se enfrentan entre ellos, por lo que se dejarán puntos en su pugna.

El camino lógico apunta a que la selección certificará su clasificación en el partido en Logroño frente a Luxemburgo y ya viajará a Ucrania con la máxima tranquilidad.

De no pasar nada extraño, España tendrá dos fechas libres, las dedicadas a la repesca, para jugar amistosos. Inglaterra es la primera selección que logró su billete para la Eurocopa 2016 con su victoria en San Marino, por lo que es un rival muy factible ya que debe devolver la visita que hizo la Roja en Wembley en 2011. Del Bosque no se plantea otra cosa que seguir convocando al central y confía en que la polémica se calme, aunque parece difícil.