'Unainimidad' en la portería

Se ha sobrepuesto a su grave error contra Croacia y a base de intervenciones salvadoras ha logrado acabar con el debate en el entorno de la ‘Roja’

Desde la retirada de Iker Casillas no había una figura que generara consenso bajo los palos

Luis Enrique muestra su confianza plena en Unai Simón

Luis Enrique muestra su confianza plena en Unai Simón / Perform

Sergi Capdevila

Sergi Capdevila

Desde la época dorada de Iker Casillas bajo palos, en la selección española ha imperado una sensación de poca fiabilidad y de debate constante y permanente en la portería. Iker, uno de los abanderados del triplete logrado entre 2008 y 2012, consiguió unanimidad incluso entre los sectores más críticos de la ‘Roja’. Pero desde esa fase final del Mundial de 2014 (donde ya no rindió ni él ni el equipo al nivel esperado) se ha instalado en el seno de España ese aura casi de maldición bajo los palos.

David de Gea fue el primer relevo del ‘Santo’ en una fase final de un gran torneo. Pero la Eurocopa de 2016 no salió como se esperaba y el portero del Manchester United jamás logró afianzarse como el portero titular y supremo de la ‘Roja’. Tanto es así que, a pesar de que Luis Enrique apostó por él en su primera etapa, desde su regreso la figura de David se ha debilitado. Antes de que arrancara la Eurocopa era una incógnita total quién sería el elegido para tan delicada demarcación. De Gea, Robert Sánchez (desconocido por buena parte de la afición española) y Unai Simón. La lógica decía que este último sería el titular a tenor de lo visto los últimos meses, pero sus últimas actuaciones desconcertantes en el Athletic hacían dudar. 

LEVANTARSE DEL GOLPE

De esta forma, y con constantes preguntas sin respuesta en las ruedas de prensa a Luis Enrique por parte de la prensa, comenzó efectivamente Unai como arquero titular. Actuaciones correctas ante Suecia, Polonia y Eslovaquia disiparon un poco esos interrogantes, pero un garrafal error contra Croacia reabrió todas las viejas heridas. El guardameta del Athletic se levantó con mucha entereza de una pifia de aquellas que hunden a cualquiera, pero frente a los balcánicos terminó siendo decisivo con varias manos milagrosas.

Ya la consagración definitiva y la unanimidad en el entorno de la ‘Roja’ llegó con su brillante ‘performance’ ante Suiza. Varias manos y pies durante los 90 minutos reglamentarios y una tanda de penaltis que jamás olvidará fueron su sello. El portero vasco paró dos penas máximas y fue el héroe de una tarde que acabó con explosión de júbilo. Eufórico, Simón dio rienda suelta a toda la presión acumulada y se volvió loco después del pase a semifinales. Lucho se ha mantenido firme en su decisión en la portería (bueno, y en todas las que ha tomado y defendido) y Unai se lo ha devuelto con creces.