Pitos para Piqué y ovación para Isco
Un total de 19.000 personas vieron el entrenamiento de este viernes en La Rosaleda. Las invitaciones gratuitas de la Federación ayudaron que las gradas se llenaran de niños para ver disfrutar a sus ídolos. Entre ellos, el más aclamado, sin duda, fue el madridista Isco Alarcón, malagueño, que se llevó todo el cariño de su gente. Luis Alberto, jugador de la Lazio que jugó en el Málaga, también se llevó los aplausos de la gente y el tercero más 'querido' entre la parroquia malagueña fue Sergio Ramos.
Evidentemente, Gerard Piqué se llevó sus dosis de pitos y abucheos, aunque en honor a la verdad la intensidad fue mucho menor que en otras ocasiones. Cuando saltó al terreno de juego fue el momento más álgido de reproche al jugador en las gradas, pero cuando comenzó la sesión la intensidad bajó hasta ser ya un pequeño murmullo cuando tocaba el balón.
Solo recibió después algún tímido pitido en cada gol que marcó en el partidillo. Y se dio la circunstancia que estuvo especialmente activo arriba al ser capaz de marcar tres goles. O sea, hablando en plata, se llevó tres tandas de pitidos.
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