Morata se reivindicó rescatando a España

Cuando más lo necesitaba España, apareció Álvaro Morata para rescatar a la selección de Luis Enrique, que estaba en la lona tras el tanto de Chiesa, que había puesto por delante a los de Mancini. El delantero del Atlético -cedido en la Juventus- fue protagonista en la previa del choque, ya que se quedó en el banquillo en beneficio de Oyarzabal. Caprichos del destino, fue Morata quien, entrando desde el banquillo, devolvió la vida a España anotando su tercer tanto en la Eurocopa.

Morata entró en el terreno de juego en el minuto 62, solo dos después de que Chiesa abriera el marcador. En el minuto 80, con España ya a la desesperada, el atacante arrancó en conducción por el carril central, se asoció con Olmo, que le devolvió la pared de forma muy precisa. Con un control perfecto, Morata se plantó delante de Donnarumma, al que batió por el palo corto, desatando la locura entre los integrantes de la selección española, que empezaba a verse fuera de la Eurocopa.

El tanto de Morata para mandar el partido a la prórroga sirve como un ejercicio más de reivindicación para un jugador que fue objeto de duras críticas en las primeras jornadas de la Eurocopa por su falta de acierto. El propio Morata reconoció que lo pasó mal tras recibir amenazas y ahora, su gol sirve para quitar razones a sus detractores.