Aires de cambio con Markel en la selección

El arquitecto del mejor Barça se estrena como director de fútbol femenino de la RFEF en el un momento de transición hacia la que tiene que ser una nueva etapa

Lo hace junto a Gonzalo Rodríguez, quien fue su mano derecha en el club durante tres años antes de saltar al masculino

Primer día de Markel Zubizarreta en la RFEF

Primer día de Markel Zubizarreta en la RFEF / RFEF

Maria Tikas

Maria Tikas

Primer día de Markel Zubizarreta en la oficina de Las Rozas. El arquitecto del mejor Barça de la historia -que llegó a Madrid el pasado miércoles- se estrena como director de fútbol femenino de la RFEF en el marco de una reestructuración en un momento de cambio y transición hacia una nueva etapa.

Lo hace junto a Gonzalo Rodríguez, especializado en derecho deportivo, quien fue su mano derecha durante tres años en el club azulgrana como delegado del equipo antes de dar el salto al primer equipo masculino, donde estuvo hasta final de la temporada pasada. 

Juntos formaron una gran dupla en el Barça. Markel se encargaba de la parte deportiva -firmó estrellas internacionales como Lieke Martens, Caroline Graham Hansen o Fridolina Rolfö, entre otras, y jóvenes promesas como Salma Paralluelo, Vicky López o Giulia Dragoni y fue el responsable del crecimiento de jugadoras como Alexia Putellas, Aitana Bonmatí o Patri Guijarro-. Y Gonzalo se encargaba del resto, desde una figura de atención a las futbolistas -como buscar vivienda para las nuevas incorporaciones- hasta la gestión de los desplazamientos del equipo, entre tantas otras funciones. Todas las jugadoras hablaban maravillas de él. 

Y también trabajará con Ana Álvarez, hasta ahora directora de fútbol femenino, que pasará a ser responsable del desarrollo de esta área.

NUEVOS RETOS

Uno de sus grandes retos es la vuelta de algunas de las mejores jugadoras del mundo como Mapi León, Patri Guijarro y Claudia Pina, entre otras. Las tres son conscientes de que se están produciendo cambios, pero necesitan un tiempo -y evidencias de estos cambios- para poder volver. Markel y Gonzalo las conocen bien y su figura debería poder contribuir a limar asperezas entre ellas y la RFEF .  

Otro de los objetivos tiene que ser la mejora de las competiciones organizadas por la Federación, como la Supercopa o la Copa de la Reina. Hasta ahora, las sedes de las finales se han anunciado con poca antelación y los escenarios elegidos tampoco favorecían la asistencia del público. Un espejo en el que mirarse, en este sentido, es Inglaterra, con gran afluencia en los estadios tanto en los partidos de la selección como en las competiciones de club. Por el resto, los cambios van llegando poco a poco y las campeonas del Mundo merecían una estructura a la altura de su talento y de sus éxitos.