España, a llevarse el 'match ball' por el Mundial

La Roja solo necesita un punto ante Suecia en La Cartuja, pero saldrá a por la victoria

La selección ha acudido a los últimos once mundiales y quiere evitar una peligrosa repesca

España se ejercita en las mismas condiciones que Suecia

Luis Enrique no ha querido entrar en polémicas y se ha confirmado que, al igual que el combinado escandinavo, la selección también se ha ejercitado con lámparas en una de las porterías / Jordi Gil

Jordi Gil - Sevilla (Enviado Especial)

La Cartuja de Sevilla respira este fin de semana un ambiente muy especial. La jornada previa ya no fue la convencional de un partido de clasificación para el Mundial. La expectación era máxima, con una masiva presencia de medios de comunicación sueco y una tensión que se palpaba el ambiente. Solo puede quedar uno entre España y Suecia y este domingo se conocerá el desenlace de quien tiene el billete para Catar 2022 o quien se marcha a la repesca.

Suecia está nerviosa. La derrota frente a Georgia que le llevó a la segunda posición dolió mucho. Los nórdicos contaban con que le valiera un empate en Sevilla para acabar como líderes y ahora deben ganar. El privilegiado de llegar al Mundial con un solo punto ha pasado a España y los suecos lo han digerido mal.

Acusaciones injustas

Su técnico, Janne Andersson, sorprendió en la rueda de prensa al acusar a España de “no jugar limpio” por un detalle tan insignificante como que en el entrenamiento no pudo utilizar una de las porterías porque esa área estaba cubierta con unas lámparas para proteger el césped. Una queja que sonó a muy exagerada e injusta ya que la Roja se ejercitó unas horas después en idénticas condiciones.

La previa del España - Suecia, correspondiente a la fase previa del Mundial de Catar 2022

La previa del España - Suecia, correspondiente a la fase previa del Mundial de Catar 2022 / Sport.es

Todo sonó a un intento del veterano entrenador de enturbiar el ambiente y de motivar a sus futbolistas ante la teórica encerrona que les podría esperar. Luis Enrique no entró al trapo y afirmó que “no estoy aquí para juzgar las palabras de nadie”, añadiendo que “no valoraré algo que no puedo controlar”.

Andersson se aferró a los precedentes para creer en las posibilidades de su equipo. Suecia no ha perdido en los últimos tres precedentes que se han producido de forma reciente con España, con dos empates y una victoria. Pese a todo, el guión de estos partidos fue de un abrumador dominio español y una Suecia defensiva sacando provecho de sus pocas oportunidades. Una relato que le encantaría repetir al técnico sueco, aunque Luis Enrique está convencido de que si su equipo ataca, se llevará la victoria. Lucho ni quiere hablar de lograr un solo punto, pese a que le resulta suficiente, quiere ganar de forma imperiosa.

Once mundiales seguidos

El factor ambiental será un elemento que puede decantar la balanza. La Federación se ha volcado para que La Cartuja esté llena y lo ha conseguido. Unos 60.000 espectadores acudirán al estadio andaluz para animar a España en medio de un gran ambiente. Las proezas en tierras sevillanas, como el pase para el Mundial de Estados Unidos ‘94 ante Dinamarca o el 12-1 frente a Malta han sido recordados. Sevilla tuvo durante mucho tiempo una relación especial con la selección española que la Federación ha querido recuperar.

Otro elemento muy importante para el partido era el estado del terreno de juego. El césped durante la Eurocopa estuvo mal y perjudicó el juego español. Los operarios de La Cartuja se han centrado en las últimas semanas en dejar un campo impecable y el equipo se encontró ayer un tapete en muy buenas condiciones para jugar al fútbol.

España ha encadenado once mundiales de forma consecutiva, faltó en Alemania’74, y no se pierde una gran cita desde la Eurocopa de 1992. La selección se ha consolidado en la élite y quiere también estar en la Copa del Mundo de Catar 2022. Siempre quedaría el comodín de la repesca en marzo, pero será un cara o cruz con dos partidos únicos que se deben superar y quizá el último en campo contrario. Un sorteo decidiría la sede definitiva. 

En cualquier caso, Luis Enrique no quiere ni pensar en una hipotética derrota y siguió insuflando optimismo a sus jugadores. En el entrenamiento estuvo enérgico desde el primer momento con el tono alto que ha mantenido desde que el lunes inició la concentración. El asturiano es el líder de este equipo y se pone siempre por delante. Para lo bueno y para lo malo. Hoy espera que salga cara y España entre por la puerta grande al Mundial.