Un poco de 'calma' en medio de la tormenta

El técnico Jorge Vilda y las capitanas Irene Paredes, Jenni Hermoso y Patri Guijarro comparecieron ante los medios para explicar su versión de la crisis que vive la selección absoluta

La polémica quedó 'zanjada' de cara al exterior con la sensación de que se ha dado un paso atrás

Vilda, durante la rueda de prensa

Vilda, durante la rueda de prensa / EFE

Maria Tikas

Maria Tikas

Después de llegar a una situación límite la crisis que se está viviendo en la selección española femenina absoluta, el técnico Jorge Vilda y las tres capitanas, Irene Paredes, Jenni Hermoso y Patri Guijarro, rompieron su silencio en la rueda de prensa previa al partido de clasificación para el Mundial ante Hungría para ofrecer su versión de los hechos.

A pesar de la tensión y el malestar que se percibió en el ambiente, ambas partes coincidieron en un punto clave: las capitanas sí transmitieron a Vilda el sentimiento, de todo el grupo, de descontento sobre todo en la Eurocopa. Eso sí, la comparecencia del técnico fue de media hora y la de las tres capitanas, de diez minutos, en los que solo pudieron responder, cada una, a una sola pregunta por “falta de tiempo”, pues a las 18.30h estaba programado el entrenamiento. Paredes atendió a dos.

VILDA, CON CONFIANZA

El primero en hablar fue el seleccionador, que antes de atender las preguntas de los medios quiso mandar un mensaje en el que dejó claro que se siente “reforzado y con confianza” para seguir: “Quiero transmitir primer mi sentimiento de decepción. Me siento dolido con esta situación por la forma en la que se ha procedido a hacer todo. Pienso que se han traspasado los códigos del fútbol, la primera ley en este deporte es que lo que pasa en el vestuario se queda en el vestuario y se soluciona internamente. Soy una persona dialogante, mi puerta siempre está abierta para hablar. Me siento muy fuerte por el equipo que hemos construido y que se ha ganado el respeto de todo el mundo por su forma de jugar y por los resultados, que sí son mejorables. También tengo todo el apoyo de la Federación y de toda la gente de fútbol, de amigos y de familia, así como la fuerza del cuerpo técnico que apoya y empuja. Tenemos por delante un Mundial, un tiempo de preparación y cinco fechas FIFA. Y, sobre todo, algo que no se nos puede olvidar: lo más importante es el fútbol y, en este caso, el partido ante Hungría”.

DISCURSO INAMOVIBLE

Los periodistas y las periodistas que asistieron a la rueda de prensa en Las Rozas le preguntaron a Vilda sobre varios temas relacionados con esta crisis: si se había planteado dimitir, si sentía la confianza total del grupo de jugadoras, si iba a ejercer represalias hacia las jugadoras que no estaban de su parte, tal y como han recogido algunos medios en los últimos días, y si se sentía capaz -y cómo iba a hacerlo- de reconducir una situación que parece insostenible. Su respuesta fue parecida, siguiendo su discurso inicial, en todas estas preguntas: “Me siento con total confianza y fuerza para seguir trabajando y seguir creando una selección competitiva. Estar aquí y representar a mi país es un privilegio. Estamos en la vanguardia del fútbol femenino. Esto en el pasado fue un paraíso futbolístico y creo que en el presente y en el futuro puede volver a serlo”.

¿REPRESALIAS?

Insistido sobre la posibilidad de represalias a las jugadoras que no están de su parte, Vilda fue contundente: “Lo que tengo que atender es a las actitudes de cada futbolista y a los entrenamientos y partidos. Lo que me transmiten al campo es que están luchando por un puesto. Estamos atentos a las jugadoras que quieren de verdad estar aquí. No hay ninguna que por ahora haya dicho que no quiera estarlo”.

MENSAJE DE PAREDES

Tras la comparecencia de Vilda, las tres capitanas de la selección subieron al ‘estrado’ acompañadas en el auditorio por todas sus compañeras de selección. La primera en pronunciarse fue Irene Paredes que, como el técnico, quiso, con la voz quebrantada y aparentemente afectada emocionalmente, mandar un mensaje antes de atender a los medios: “Primero quiero dejar claro que hoy estamos aquí porque lo hemos pedido expresamente. Debido a toda la información que ha salido durante los últimos días, las capitanas hemos decidido comparecer y dar nuestra versión sobre una situación que no está siendo nada fácil. Las jugadoras en ningún momento hemos pedido la destitución de Jorge. Las capitanas, en nombre del grupo, hemos transmitido tanto al técnico como a la Federación, nuestro sentir. Como capitanas tenemos la obligacion de hacerlo. Ha habido muchas filtraciones, varias son falsas y hacen daño. Dicho esto, nos consta que se va a intentar cambiar la situación de la selección para que haya mejoras, que al final es el fin común. Ahora tenemos un par de partidos muy importantes y queremos que nadie dude de nosotras”. La opinión pública, fomentada por algunos medios, apuntó a Paredes como “cabecilla del motín contra Vilda”. Preguntada por esto y por si se sentía traicionada por alguna compañera, la vasca fue clara: “Dentro del grupo hay alguien que tiene que hablar. Yo, como primera capitana, fue la primera en hacerlo, no la única. Es una situación complicada para el equipo porque a nadie le gusta estar así. Somos un equipo ambicioso, queremos mejorar, ganar, creíamos que había ciertos aspectos que debían cambiar. Hay veces que hay que ser valiente, decir las cosas aunque no sean agradables para que cambien”.

JENNI Y PATRI, EN LA MISMA LÍNEA

Parecidas fueron las declaraciones de Jenni y Patri. La madrileña aseguró que “somos profesionales y cuando pisamos el terreno de juego no pensamos en nada más, somos maduras como para tomar la decisión de si queremos estar aquí o no”. La balear añadió que “decidimos trasladar esta sensación generalizada porque con la plantilla que tenemos creemos que podemos lograr grandes cosas”.

Quedará por ver qué acaba pasando, pero, de momento, polémica zanjada con la sensación de que se ha dado un paso atrás.