Al baile de Lamine solo le faltó el gol

El delantero hizo de todo ante Georgia y se convirtió en el futbolista más joven en disputar una eliminatoria de Eurocopa 

Celebró el gol de Nico con una coreografía especial; los dos impulsaron a España desde los extremos

Lamine, otra exhibición

Lamine, otra exhibición / EFE

Dídac Peyret

Dídac Peyret

Le costó entrar en el partido, pero cuando lo consiguió hizo saltar la banca. Así funcionan los jugadores diferentes: no necesitan ser constantes para poner patas arriba los partidos. Lamine volvió a demostrar que es uno de ellos. Hubo pocas noticias suyas en la primera parte, pero en la reanudación demostró que es uno de los jugadores más creativos del torneo. Suya fue la asistencia del segundo gol de España, obra de Fabián de cabeza.

El gesto de Lamine define a un futbolista imaginativo, preciso, que marca diferencias con acciones y movimientos delicados. Esta vez un caramelo desde la banda, un golpeo suave, liftando, para que Fabián rompiera el empate desde el segundo palo. Una de las acciones favoritas de Lamine, que ya en el debut de España en el torneo regaló una asistencia parecida a Carvajal.

La jugada impulsó a Lamine, que activó la banda derecha de la selección, tras unos primeros 45 minutos donde el juego pasó más tiempo por la banda de Cucurella y Nico. Yamal encontró en Carvajal un socio valioso. Es algo que parece haber surgido de manera natural, como ocurre siempre con las grandes sociedades en el fútbol. Los dos se respetan los espacios, cuando uno estira para fuera el otro ocupa espacios interiores.

Lamine rondó el gol durante toda la segunda parte. Tras la asistencia, en la siguiente jugada buscó un disparo al primer palo, esta vez con un golpeo más contundente, pero sin estrenar su casillero. También con un golpeo a balón parado, donde se está soltando con la selección, que obligó a Mamardashvili a responder. 

Lamine lo siguió intentando. Persiguió el gol sin éxito. Ni siquiera cuando un error en el pase de Georgia lo dejó dentro del área con todo a favor para marcar. El extremo trató de ajustar tanto el disparo que el balón pasó rozando el palo. Unos minutos más tarde un centro suyo terminó en la red tras un mal rechace de la defensa georgiana, pero el colegiado anuló el gol por fuera de juego. Solo le faltó el gol a Lamine, que terminó bailando en la celebración del gol de Nico Williams en el 3-1.

Pedri, noche de contrastes

“Os voy a contar una intimidad: Pedri ha vuelto”. Con esta sentencia, De la Fuente anticipó la Eurocopa del canario. Pedri se parece cada vez más al futbolista que deslumbró en sus primeras temporadas en el Barça. Lo está haciendo cerca del área. Siendo un facilitador para los delanteros y el jugador al que sus compañeros en el mediocampo buscan cuando necesitan soluciones.

Ante Georgia volvió a jugar por delante de Rodri y Fabián. Cerca de Morata, pero pendiente de los movimientos de Lamine y Nico. En el primer gol de España, dejó una de las jugadas del partido: un lujo de asistencia de primeras a Nico. Pero salió en la foto del gol de Georgia, donde suya fue la pérdida con la que arrancó la jugada. De la Fuente no tardó en sustituirlo en el comienzo de la segunda parte para dar entrada a Olmo. El seleccionador está cuidando al canario, que sigue volviendo.