Rudiger pone en un dilema a Ancelotti

El central alemán comenzó la temporada de suplente, como en su primer año, pero la lesión de Militao cambia su presente

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@thebleacherreport

Alejandro Alcázar

Alejandro Alcázar

Antonio Rudiger llegó al Real Madrid coincidiendo con la salida de Sergio Ramos. No lo hizo para ser el relevo del sevillano, pero sí para reforzar una defensa en la que tenía por delante a Alaba y a un Militao que se habían ganado el puesto pese a su juventud. Ha sido la pareja fija de Ancelotti en los dos últimos años, con el alemán y Nacho de relevos naturales, además de Vallejo como quinta opción del año pasado, hasta que salió cedido esta última temporada al Granada.

Lanzó el penalti que eliminó al City en la Champions

Lanzó el penalti que eliminó al City en la Champions / Efe

Ante la nueva temporada que comienza, Ancelotti se va a encontrar con el mismo dilema que ha tenido en el final de este curso con Lunin y Courtois. El ucraniano dio la talla, pero el italiano lo sacrificó para devolver al belga la titularidad bajo palos. Un panorama similar se le va a presentar a partir de agosto o septiembre con Rudiger y Militao en el perfil derecho del centro de la defensa.

El jefe de la defensa

La inoportuna lesión de Militao en agosto del año pasado llevó a Ancelotti a elegir a Rudiger como relevo por delante de Nacho, también diestro aunque se maneja bien con la izquierda. El alemán fue creciendo a medida que avanzaba la temporada para convertirse en el defensa más regular del equipo marcando territorio por su potencial físico, valentía y capacidad intimidatoria. Sabe sacar el balón desde atrás y por alto es una garantía.

Rudiger con Lewandowski

Rudiger con Lewandowski / Efe

Condiciones valoradas que le han dado galones en la zaga, confianza y el respeto de sus compañeros haciendo olvidar al brasileño. Su figura creció incluso más con la lesión de Alaba en diciembre, siendo el soporte del eje defensivo en ese baile que se trajo Ancelotti con Nacho y Tchouameni en el otro perfil, aunque cuando elegía al francés era Rudiger el que ocupaba la izquierda sin que se notase demasiado el cambio de posición.

Un Militao a la baja

Militao se recuperó en el último mes y medio de competición y por mucho que Ancelotti intentase devolverlo a su sitio, el brasileño no volvió a ser el de los dos años anteriores. La lesión dejó secuelas anímicas que no acabó de superar después de ocho largos meses de recuperación y no fue el mismo. El italiano acabó descartándolo para los partidos importantes del final de temporada para mantener a Rudiger en el puesto.

Rudiger va a poner ahora en un serio dilema al italiano cuando comience la temporada y aún más cuando Alaba se recupere plenamente de la lesión. Tendrá que dejar a uno de los tres en el banquillo, y el alemán ha dejado sentado que tiene tantas o mejores prestaciones que el brasileño, que está por ver si vuelve a ser el mismo que antes de la lesión. A eso se puede sumar más competencia si fichan a Leni Yoro además de que repesque a Rafa Marín. Y todo contando con que Nacho se irá.