Rüdiger 'enloquece' a Alemania

Antonio Rudiger es un tipo especial. Un jugador que hace equipo desde su 1,90 de estatura, que se adaptó al vestuario del Real Madrid de una manera sorprendente, y que se ha convertido en el terror de sus compañeros por sus efusivas celebraciones en la que reparte cachetes a diestro y siniestro. Un tipo empático que se ha adjudicado un rol de blanco y que gritó a los cielos de la plaza de Sol en la celebración de la Champions con “¡el loco ya está aquí!”.

De secundario a protagonista

Y no es que le falte un tornillo, al contrario, disfruta como nadie de su trabajo que está rentabilizando esta temporada al cien por cien y lo hace a conciencia. Llegó de puntillas al Real Madrid la temporada pasada. Lo hizo gratis, tras acabar contrato con el Chelsea, sabiendo que su papel sería de secundario ante la presencia de Militao y Alaba, los titulares indiscutibles de Calor Ancelotti.

El alemán acabó teniendo protagonismo ante las lesiones de sus dos compañeros, para participar en 51 de los 61 partidos de su equipo con 37 de titular. Esta temporada su protagonismo ha crecido por encima de sus propias expectativas. Otra vez las lesiones de sus dos compañeros le han posibilitado asentarse como titular, para convertirse en el defensa más regular del equipo con permiso de Carvajal: ha participado en 48 partidos para ser titular en 44 de los 55 jugados por su equipo.

Pilar de Alemania

A sus 31 años Rudiger está rindiendo a un nivel inesperado. Tras su buena temporada con los blancos es fijo en la selección alemana, anfitriona de la Eurocopa y ante la que España se jugará el pase a semifinales el próximo viernes. Su presencia es una garantía para el combinado germano, convirtiéndose en uno de los pilares de un equipo que bajó sus expectativas en los dos últimos años para recuperar su aureola como anfitrión del torneo de selecciones de la UEFA.

Sus actuaciones ‘enloquecen’ a Alemania, que está entregada a su figura ganándose los elogios como ha hecho en el Real Madrid. Tal es su protagonismo que ante Dinamarca fue elegido MVP del partido con una actuación soberbia. Hasta la UEFA calificó de “colosal” su partido, avalada por sus estadísticas: ganó el 100% de las disputas, el 100% de los cortes al suelo y el 100% de los balones aéreos. Además, recuperó el balón en 7 ocasiones, con 4 bloqueos y 2 intercepciones, además de no ser regateado ni una sola vez por los daneses.