Nápoles y Real Madrid lucharán por el liderato
Partenopeos y madridistas son los favoritos para copar el grupo, pero sufrieron para ganar el primer partido y saben que nadie les regalará nada
Ancelotti valora si repetir el once que ganó en Girona, aunque no descarta alguna novedad
Nápoles hace de la pasión su forma de vivir y el fútbol es el conductor ideal para dar salida a ese carácter irreductible de la Italia del sur. Ancelotti, italiano, pero del norte, conoce bien esa naturaleza, pasó por el banquillo azurri año y medio y sabrá trasladar a su tropa la batalla que van a tener que librar en el mítico estadio Maradona. A eso se suma un equipo campeón que se llevó con autoridad la Serie A para aprender a convivir con la alta competición. Recibir al Real Madrid es un aliciente extra para Nápoles y para el Nápoles, que se fusionarán en uno para dar lo mejor y elevar al cielo celeste esa pasión.
Nápoles y Madrid son los favoritos para liderar el grupo. Los blancos dieron cuenta del Unión de Berlín, y los partenopei, del Braga en la primera jornada con un denominador común: sufrimiento. Ganaron por la mínima con goles en los minutos finales, lo que aventura que nadie les va a regalar nada en este corto trayecto que da acceso a los octavos de final.
Al Nápoles le está costando plantar los pies en los raíles que le hicieron volar la temporada pasada. Rudi García se acerca a la herencia que le dejó Spalletti. El sábado se dio una alegría con la mayor victoria de la temporada, 0-4 al Lecce, y lo hizo reservando fuerzas pensando en el Madrid. El ataque funcionó con Osimhen cuando salió, y con Kvaratskhelia y Zielinski como estrellas.
SIN CENTRALES TITULARES
García tiene problemas en defensa, como Ancelotti, con sus dos centrales titulares lesionados, Juan Jesús y Rrahmani, a los que sustituye el noruego Ostigard (23 años) y el brasileño Natan (22), dos jóvenes apuestas a los que puede pesarles la responsabilidad en un partido de esta envergadura. El Madrid también tiene las bajas de sus dos centrales titulares, Militao y Alaba, pero sus relevos están más curtidos, Rudiger (30) y Nacho 33).
Mientras que el técnico del Nápoles tiene claro su mejor once, los mismos que ganaron al Lecce más Politano y Osimhen, el del Real Madrid debería tenerlo después de ganar en Girona. Un partido importante en el que recuperó el liderato con una alineación inesperada pero que respondió a la perfección. Lo normal es que el italiano mantenga esa apuesta. “De la base del Girona se puede sacar algo bueno”, resaltó este lunes y afinó: “Hay dudas, pero lo tengo claro pese a tener opciones como Mendy o Rodrygo”.
Una de las cosas que Ancelotti está obligado a exigir es que sus hombres salgan enchufados. Una laguna que arrastran encajando goles demasiado pronto para remar contra corriente. Son detalles para pulir, porque el Nápoles le ha “estudiado” y conoce sus “debilidades”, como asegura Rudi García. Será una batalla para salir fortalecido.
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