Ancelotti, en el punto de mira

A Carlo Ancelotti se le ha caído el equipo en el último mes. Ha ganado un partido de cinco con una pobre imagen por esa apuesta de jugar “en bloque bajo o medio”. El italiano dice que como les ha ido bien se han olvidado de presionar, pero que lo harán, aunque parece más un atajo para reservar fuerzas de los jugadores que repite partido a partido en sus alineaciones. Carletto tiene experiencia y cuajo y sabe que se juega hoy ante el Alavés más que tres puntos, aunque no se espera que tenga un as bajo la manga o cambie algo de lo que viene haciendo.  

Otro traspié facilitará la persecución emprendida por el Sevilla en la Liga. Además, Ancelotti necesita urgente un cambio de imagen para recuperar la confianza que había en su trabajo y lo reconoce: “En París jugamos muy mal”. El Alavés es un rival en teoría sencillo, pero el cordero puede convertirse en lobo. “Es la típica salida al dentista y a ver si vuelves sin dolor”, apunta el técnico babazorros Mendilíbar, peor no se le escapa que Osasuna, Elche o Cádiz se llevaron un empate. 

Tiene en contra que los blancos llegan heridos de París, donde se vio un Madrid arrugado, temeroso y sin fútbol por la táctica medrosa del italiano. No se sabe porque este Madrid deja jugar al rival y no presiona, pero al italiano se le llena la boca diciendo que físicamente están bien. No lo deben estar mucho cuando renuncia al desgaste que supone ahogar al rival con intensidad para recuperar el balón y buscar la victoria, primer mandamiento del catecismo blanco. 

“Ante el PSG bajamos el nivel, pero no por el físico porque estamos bien”, ha dicho y ha apoyado la afirmación poniendo ejemplos de muchos partidos en los que acabaron mejor que el rival, obviando que jugaron andando y a la defensiva hasta tener el agua al cuello. Habría que ver como acaban si presionan todo el partido. 

Se le ve dando latigazos de indiferencia a los que no se entrenan como él quiere, pero no a los que han dejado de responder en los últimos partidos. Por eso no se esperan demasiadas novedades en el once. Serán los mismos de siempre. El italiano habrá dado palmaditas a los que quedaron retratados en París en lugar de dejarlos en el banquillo como hizo con Hazard tras perder con el Sheriff, cruz que sigue clavada en la espalda del belga. No ha sido el único pero si el más significativo, porque cuando le ha dado minutos ha respondido y convencido al madridismo menos a él. 

El Alavés llega necesitado. Ocupa puestos de descenso y pelea contra su propio destino con cierta desesperación. El triunfo ante el Valencia ha reactivado la ilusión para un partido en el que tienen poco que perder y mucho que ganar.

Ancelotti tiene a toda la plantilla para elegir once. Benzema respondió en París y liderará de nuevo el ataque. Mendilíbar tiene la importante baja de Laguardia por sanción al que sustituirá el estadounidense Miazga. Se espera que mantenga el equipo que ganó y convenció ante los ché.

Margen de confianza de Florentino

"No hay malestar en el club conmigo. He hablado con el presidente, el director deportivo y miembros de la junta y estamos todos dolidos. Somos muy honestos, en París hemos jugado muy mal y la imagen no ha sido buena. El resultado se puede cambiar porque no fue malo, quizá fue lo mejor que nos pasó en el partido”, ha afirmado Carlo Ancelotti ante esos rumores ventajistas de que Florentino Pérez le va a echar ahora que les está costando ganar. “El planteamiento del partido no ha sido bueno, por eso tenemos que entender las críticas. A veces son justas y me hacen pensar más. Otras son tonterías como que discuto con los jugadores. La crítica es agradecida, las tonterías no”, agregó sereno el técnico italiano.