El United aguanta el tirón y golea al Everton

El Manchester United aguantó el tirón y tumbó al Everton de Koeman, que acabó siendo goleado y acumula su cuarto partido de liga sin ganar.

A los diablos rojos no les hace falta brillar para castigar a su oponente y endosaron un 4-0 a los de Liverpool el día en el que Rooney volvió a Old Trafford.

El Everton, sin embargo, estuvo en el partido hasta que Mkhitaryan lo cerró con el 2-0 a siete minutos para el final. Lukaku y Martial se acabaron uniendo a una fiesta que inauguró Valencia con uno de los goles de la semana.

El Everton es el único equipo de la Premier que hasta ahora solo tiene un goleador. Los dos tantos anotados por Wayne Rooney es todo lo que han marcado en cinco partidos.

En el hijo pródigo ‘toffee’ precisamente se encomendó Koeman en su once, situándolo como único referente arriba. Detrás suyo, el Everton se armó en un bloque de hormigón, con línea de cinco defensas y trivote por delante, para contrarrestar a un Manchester United que cada semana tiene más definidas sus ideas.

Mkhitaryan ya está consolidado como enganche por dentro, justo detrás de Lukaku, y Mourinho dio continuidad a Mata para dar asociación en corto. En largo, por la banda izquierda, Rashford tuvo su oportunidad. Y en este cúmulo de mecanismos, quien marcó la diferencia fue un protagonista inesperado: Antonio Valencia.

A cañonazo limpio

El lateral colombiano abrió el marcador cuando Mourinho apenas se había puesto de pie en su área técnica, y perforó la red con un cañonazo desde la frontal de los que gustan en Inglaterra: sin pensarlo, de primeras y con un una potencia que hizo imposible la estirada de Pickford. El inicio fue óptimo para los intereses del United, que asestó un golpe a las primeras de cambio a todo el plan de Koeman, que pese a recibir un tanto no cambió de idea y siguió conservador atrás.

El control siguió siendo del United mientras el Everton se centraba en sobrevivir, y lo hizo en parte gracias a un viejo conocido. Romelu Lukaku, ahora vestido de rojo, se enfrentó por primera vez contra su anterior equipo y tuvo el detalle de ahorrarles un gol su primera ocasión clara, una contra en la que se zafó de Jagielka y cruzó demasiado ante Pickford.

Los ataques visitantes se resumían en la profundidad de Cuco Martina por derecha y la inspiración de Rooney, limitado ante la falta de ayudas, pero que se las arregló para poner a prueba a un excelente De Gea.

La mayor estirada del Everton llegó tras el descanso. En los primeros minutos de la reanudación, los de Koeman dieron un paso adelante y gozaron de sus mejores ocasiones en el partido.

Rooney i Sigurdsson se plantaron en el área rival, pero sus tiros volvieron a chocarse con el infranqueable De Gea. Las advertencias visitantes despertaron al United, y Mou reaccionó metiendo a un hiperactivo Lingard en banda.

Juan Mata tuvo el segundo en sus botas en un lanzamiento de falta que mandó al poste, mientras Lukaku seguía negado en el remate, pero compensó su falta de acierto con generosidad. El belga fue el origen de la acción que acabó sirviendo en bandeja a Mkhitaryan la sentencia. El armenio se coló por una defensa ‘toffee’ ya descompensada y marcó con un tiro cruzado ante Pickford.

La sentencia destrozó al Everton, que se dejo ir y acabó saliendo goleado de Old Trafford. Lukaku obtuvo premio a su inquebrantable insistencia y puso el tercer gol en el marcador con un tiro potente, y Martial cerró el resultado en el tiempo añadido transformando un penalti que él mismo provocó.

El 4-0 deja la cabeza de la Premier totalmente igualada. United y City tienen los mismos puntos, los mismos goles anotados, y los mismos recibidos, mientras los de Guardiola serán líderes por una cuestión abecedario. Tras los pinchazos de Chelsea, Arsenal, Liverpool y Tottenham, la ciudad de Manchester consolida su liderato y confirma, una semana más, que está decidida a llevarse hacía el norte la corona de Inglaterra.