¿Ha llegado el momento de Adama Traoré?

Adama Traoré se convirtió en agente libre el pasado 1 de julio y no encontró equipo hasta el 11 de agosto. Se rumoreó una aventura en Italia, un regreso a España después de su aventura fugaz en el Barça e incluso se habló de Turquía, pero nada más lejos de la realidad, firmó con el Fulham para escribir un capítulo más en su historia en la Premier League.

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Tras una temporada discreta en los Wolves, en la que únicamente pudo marcar tres goles y repartir dos asistencias en 40 partidos, Adama necesitaba continuidad para demostrar que su fútbol va más allá de sacrificio, esfuerzo y potencia.

El extremo de L’Hospitalet posee características más que necesarias para una liga tan exigente como la Premier League, pero que se pueden quedar cortas de no cumplir con ciertas expectativas en cuanto a contribuciones goleadoras, especialmente para un delantero.

UN INICIO COMPLICADO

Por desgracia, sus primeros meses como 'Cottager' no han sido fáciles, ya que solo ha logrado acumular 101 minutos en el terreno de juego, distribuidos en cuatro partidos de Premier League (con un total de 40 minutos) y uno de EFL Cup (con 61 minutos).

Una lesión en el tendón de la corva, sufrida el pasado 3 de septiembre después de la dura derrota ante el Manchester City (5-1), lo mantuvo fuera de juego durante 69 días. Más de dos meses de inactividad que llegaron a su fin el pasado fin de semana, cuando disputó nueve minutos testimoniales en la derrota contra uno de sus exequipos, el Aston Villa (3-1).

La reaparición es una gran victoria para un Adama que tiene ganas de demostrar todo su potencial. El parón de selecciones le vendrá aún mejor para seguir trabajando y coger ritmo para su siguiente test, el próximo 27 de noviembre. Curiosamente, se medirá a su exequipo, el Wolverhampton, en el duelo correspondiente a la jornada 13 del campeonato británico.

Su discreto papel la temporada pasada y la mala suerte con las lesiones han hecho que su tasación caiga un poco. Ahora mismo, el extremo de 28 años está valorado en 10 millones de euros según ‘Transfermarkt’, muy lejos de los 40 ‘kilos’ que llegó a tener de valor de mercado en su mejor etapa en los Wolves, en el 2020. ¿Logrará rendir a su máximo nivel esta temporada?