El Liverpool no falla ante el West Ham y ya le saca 19 puntos al City

El West Ham tampoco es un escollo para el Liverpool

Roger Payró

El Liverpool podría perder los próximos seis partidos de liga y seguiría siendo el líder de la Premier. Ese derecho a poder sufrir una racha pésima y no notarlo a nivel clasificatorio se lo ha ganado a pulso un equipo que va descontando fechas para cantar un alirón que se le resiste desde que hay formato Premier. Los de Klopp recuperaron el duelo aplazado por su disputa del Mundial de clubes ante el West Ham y lo superaron con mucho oficio. Salah, de penalti, y Oxlade-Chamberlain dieron tres nuevos puntos al Liverpool, que lleva 70 de 72 posibles este curso. Una locura.

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Premier League

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2
Alineaciones
West Ham
Fabianski; Ngakia, Issa Diop, Ogbonna, Cresswell, Masuaku; Snodgrass, Rice, Noble; Lanzini (Fornals, 69') y Haller.
Liverpool
Alisson; Alexander-Arnold (Keita, 77'), Gomez, Van Dijk, Robertson; Oxlade-Chamberlain (Jones, 85'), Henderson, Wijnaldum; Salah, Firmino y Origi (Fabinho, 69').

Tras empatar 2-2 en la FA Cup ante el Shrewsbury con una mezcla entre la suplentes y jugadores del Sub-23, Klopp volvió a alinear un once más que reconocible, con Origi por el lesionado Mané. Enfrente, el cuadro ‘red’ se encontró con un West Ham que se le encerró atrás con el 5-3-2 diseñado por Moyes. Una triangulación entre Firmino, Salah y Robertson fue la primera vez que el líder logró encontrar espacios en la defensa ‘hammer’, pero a la definición del lateral le faltó un poco de fuerza.

No asediaba el Liverpool aunque tampoco le hizo falta para marcar el primero. Firmino, con una tranquilidad pasmosa dentro del área, cedió a un Origi que fue derribado claramente por Diop. Muy endeble la zaga local. Salah no perdonó desde los once metros y el plan de Moyes saltaba por los aires.

En la reanudación el técnico tuvo que elegir entre morir matando o vivir de rodillas. Eligió lo primero y los de Klopp no tardaron ni diez minutos en castigarlo. Fruto de su paso adelante, el West Ham logró su primer córner del duelo, pero Van Dijk se elevó para despejar y ahí nació el 0-2 con un contragolpe letal. Salah asisitió con el exterior a Oxlade-Chamberlain y el inglés superó sin problemas la salida de Fabianski.

La montaña ya fue muy difícil de escalar para el conjunto de Moyes. Para más inri, las pocas veces que el Liverpool erró en la salida de balón, Alisson apareció para negar el tanto a Snodgrass primero y Rice después. Salah, con un disparo a la madera, pudo haber redondeado su gran partido. A este Liverpool no hay quien lo pare.