El Leicester se salva mirando al Atlético

Leicester se viste de Champions tras solventar su permanencia en la Premier. El campeón, hundido hasta el mes de febrero, se dejó la victoria en Selhurst Park... Pero sumó un empate que a fin de cuentas le supo de maravilla, acompañado de las derrotas de Bournemouth, Hull y Swansea que prácticamente entierran los fantasmas del descenso.

A los 52 minutos marcó Vardy el 0-2 y a los 70 anotó el 2-2 Benteke, encendiendo el ánimo de los Eagles, despertados con la llegada de Allardyce pero necesitados de sumar ante el calendario que les espera y que debe enfrentarles aún a Liverpool, Tottenham, City y United...

En los Foxes la realidad hasta este sábado no era, aún, del todo distinta. Con el Atlético asomando, Craig Shakespeare debió comprender la trascendencia del choque porque una derrota habría devuelto las dudas y catapultado por encima al Palace para borrarse del sufrimiento. Así, probablemente por ello, el entrenador decidió poner en el escenario a un once muy reconocible.

De hecho, acaso lo más destacado fue la presencia en el once de Leo Ulloa, por segunda vez esta temporada en la Premier y como acompañante de Vardy en el ataque. Porque el '9' apareció como Mahrez, o Huth, Fuchs, Albrighton y Schmichael... Apenas Drinkwater y Okazaki quedaron en el banquillo, además de Morgan, aún de baja y cuya reaparición ante el Atlético de Simeone se da poco menos que descartada, en un Leicester que sacó petroleo a las primeras de cambio.

Titular por segunda vez en todo el curso, Ulloa fue la gran novedad de los Foxes

A los cuatro minutos, en su primer y único lanzamiento de esquina del primer tiempo, Huth remató imperial el centro de Fuchs para poner el 0-1. Y a partir de ahí el campeón se puso el mono de trabajo y comenzó a remar para mantener ese triunfo que entendía indispensable.

Lo pareció sentenciar el 0-2 de Vardy, en un gol con denominación de origen: balón a Mahrez en contragolpe y pase a la carrera para que el 9 marcase... Pero contra toda la lógica de su solvencia defensiva el Palace le igualó. Cabaye de inmediato puso el 1-2 y al rato un cabezazo de Benteke a centro de Townsend cerró el duelo.

Al Palece le habría ido de perlas el 3-2 pero acabó por comprender que el empate ya era buen resultado. Como para el Lester... Que abandonó Londres con ese punto, tarareando ya la música de la Champions y dispuesto a enseñarle las uñas al Atlético.