Connolly hunde un poco más al Tottenham

Un poco más tocados. Un poco más hundidos. Tanto el Tottenham como un Pochettino que empieza a estar cuestionado. Tras la destroza del Bayern en Champions tocaba reivindicarse pero ni por asomo. 

121005

Premier League

BRI

3

0

TOT

Alineaciones

Brighton
Ryan; Montoya, Webster, Dunk, Burn; Gross, Alzate (Bong 88'), Stephens (Murray 91'), Mooy; Maupay, Connolly (Bissouma 80').

Tottenham
Lloris (Gazzaniga 8'),; Davies, Vertonghen, Alderweireld, Sissoko; Ndombele (Winks 46'), Dier; Son (Lucas 73'), Eriksen, Lamela; Kane.

Goles

1-0 M.3 Maupay, 2-0 M.32 Connolly, 3-0 M.65 Connolly.

Árbitro

J.Moss. T.A.:Stephens (57'), Dunk (89') / Dier (55').

Incidencias

Falmer Stadium

Todo lo que pudo salir mal en la primera mitad ocurrió. Ni en los peores pronósticos. No solo por los dos goles de desventaja con los que se marchó el conjunto de Pochettino al descanso. También por la grave lesión que sufrió Hugo Lloris en los primeros compases del partido. Dicen que las desgracias nunca vienen solas así que se lesionó en la jugada del primer gol del partido.

Un centro que no aparentaba llevar demasiado peligro para el arquero francés acabó con un error, una mala caída, y un brazo que se quedó mal colocado en la espalda de Lloris y que con toda probabilidad se rompió. Se le retiró en camilla urgentemente y el club todavía no se ha pronunciado al respecto.

Sin Lloris tuvo que entra Gazzaniga ya con el marcador en contra. Ya fuera por el mal momento de forma de los Spurs o por lo frío que se quedaron los compañeros del francés tras su lesión, el Tottenham realizó una pésima primera parte. Atropellado en todo momento por unas gaviotas que olían sangre.

Más Connolly que nadie. Superlativo durante todo el choque, encontró el camino a su primer gol del partido tras una combinación rápida a la que Sissoko llega tarde a la cobertura, acaba en centro y remate complejo del delantero que paró Gazzaniga en una buena intervención. Sin embargó el balón quedó muerto y más listo que nadie, el canterano del Brighton no perdonó una segunda vez.  

La sensación con el paso de los minutos es que lo mejor para el Tottenham era el resultado. Los locales tuvieron infinidad de ocasiones que no supieron resolver. Solo Connolly, ya en el segundo tiempo, tenía la mira calibrada para poner el tercer y definitivo tanto del partido. Tiraron la toalla los de Pochettino que no carburan. Preocupa el nivel de sus estrellas. Están en caída libre.