La opinión

El regalo del Tata Martino a Marc Bartra

Joan Vehils

Primeros contactos. El Barça tiene algo menos de tres meses para renovar a Bartra y evitar que pueda negociar con otro club. El canterano acaba contrato a final de temporada porque en su día prefirió no prolongar su relación con el club sin saber si el entrenador contaría con él. La apuesta le ha salido bien y ahora es el club quien tiene que perseguirle. De cualquier manera, no debe haber problemas. La máxima ilusión es seguir en el Barça y se entenderán. Eso sí, gracias a esos dos partidos que el Tata le ha hecho jugar, Bartra podrá pedir algunos euros más...

Moción de quita y pon. Los dos socios que esta semana han realizado el amago de presentar una moción de censura a Rosell y a tres vicepresidentes solo han disfrutado de tres días de gloria. Ellos, como cualquier otro socio del Barça, tenían todo el derecho de utilizar esa herramienta democrática que contempla los estatutos del club pero para que la cosa procediera deberían haberse informado antes de visitar las oficinas del Camp Nou. Si la intención era convocar una rueda de prensa para presentar un renglón de argumentos contra Rosell, su objetivo está cumplido. Si lo que querían era presentar la moción, desbancar al presidente y convocar elecciones tenían que saber que para llegar a buen puerto necesitaban las firmas del quince por ciento de los socios. Es decir, antes, tendrían que haberse asesorado para conocer el número de firmas que necesitaban. Ni eso hicieron. En fin, que vuelve la calma. Ellos sabrán por qué lo han hecho.