¿Otro punto de inflexión con el VAR del Madrid?

El 6 de enero de 2019, Vinicius se desplomó ante Rulli, el portero de la Real, y el árbitro José Luis Rodríguez Munuera, tras consultarlo con el VAR, se ratificó en su decisión: no había penalti. El Madrid perdió aquel partido por 0-2, y se hizo célebre el mensaje que Mario Melero le envió al árbitro desde la sala de videoarbitraje: "Todo ok, José Luis". Pocos minutos después de terminar el partido, Florentino Pérez llamó a Rubiales para pedirle explicaciones en una tensa e inédita conversación.

Lo cierto es que, a partir de aquella llamada, el VAR favoreció siempre al Madrid en aquella Liga en caso de duda (ante el Valencia o en Anoeta) en decisiones muy dudosas que ayudaron a decantar el campeonato a su favor. En realidad, el Madrid ha tenido desde entonces una relación plácida con el VAR hasta que en el partido contra el Girona de la pasada jornada, unas manos de Asensio (dudosas en una toma pero muy claras en otra) pitadas como penalti por la sala de videoarbitraje, han desatado una tormenta mediática en la capital de múltiples consecuencias.

Más allá de las duras declaraciones de Ancelotti diciendo que el VAR "se inventó" el penalti, se ha creado una gran olla a presión que inevitablemente irá a más: la maquinaria mediática central ha decidido que este sea el gran tema de las comparecencias del entrenador blanco, y ha puesto el grito en el cielo por una decisión a todas luces correcta, algo que inevitablemente condicionará las decisiones críticas de los árbitros a partir de ahora.

Evidentemente, la polémica con el VAR ha servido para tapar que el Madrid tiene serios problemas en la construcción del juego (que ya quedaron en un segundo plano en su justa victoria ante el Barça), pero sobretodo puede suponer un peligroso punto de inflexión.

En las oficinas del Barça ya hay quien ha recordado lo que sucedió tras la llamada de Florentino a Rubiales aquel 6 de enero de hace casi tres años. La historia nos dice que a partir de ahora, el VAR puede actuar intimidado en cualquier decisión dudosa con el Real Madrid, y en el club blaugrana temen que, al igual que en 2019, haya otro antes y después.

A raíz del supuesto escándalo, el exárbitro Iturralde González ha confesado que "cuando entré a formar parte del mundo del arbitraje me dijeron: "No te haces árbitro hasta que chocas con el autobús blanco'". Queda claro que Iglesias Villanueva, como en su día Rodríguez Munuera, ha chocado con el autobús de siempre.