Opinión

Es mejor que Ansu Fati se quede

Ansu Fati ha vivido una temporada atípica en el Barça

Ansu Fati ha vivido una temporada atípica en el Barça / Sport

Ansu Fati no quiere irse y el superagente Jorge Mendes ha confirmado acto seguido de la reunión que mantuvo con los dirigentes del Barça que el jugador seguirá en el Camp Nou. En principio, se trata de un contratiempo para los planes que el club tiene para hacer caja, liberar masa salarial y poner en marcha la ruta de fichajes prevista.

Sin duda, Fati es el jugador no titular con más cartel para ingresar una buena cantidad de dinero, con el añadido de que al ser canterano y no tener amortizaciones pendientes, todo iría directamente a beneficios.

La idea es la siguiente: perdemos a un jugador no imprescindible, el rendimiento del equipo no se resiente y salvamos el 'match ball' económico al que nos enfrentamos. Vale, pero si queremos ser justos, la cosa no es tan simple: ¿de verdad Ansu Fati es un jugador no imprescindible? Las estadísticas de su rendimiento no avalan esta consideración.

ALTO RIESGO

Por edad y condiciones futbolísticas, desprenderse de Fati es una decisión de alto riesgo. Es un delantero que posee el don más preciado que puede tener un futbolista: el gol. Esta temporada, en principio la temporada por la que se le considera prescindible, ha sido el segundo máximo goleador del equipo.

Es cierto que la proyección meteórica que se le adivinaba cuando se le dio entrada en el equipo y, de forma inmediata, en la selección, ha sufrido un parón por las lesiones, pero de ahí a darle por sentenciado media un abismo. Sus goles siguen siendo su aval. Y sus 20 años, la esperanza de que en cualquier momento pueda explotar de nuevo.

No pasa nada por el giro de guión: que Ansu se quede es una buena noticia. Habrá que replantearse la estrategia económica, negociar con otros jugadores que no dejarán el mismo rédito en caja, pero si se trata de encontrar a otros futbolistas prescindibles, y lograr con dos traspasos en vez de uno un beneficio parecido, no creo que sea un problema para nadie. Traspasar a Fati y verle triunfar diez años seguidos en la Premier, eso sí que sería un problema.

La clave: la decisión del jugador puede que sea un contratiempo económico, pero es una buena noticia deportiva.