Lewandowski, al ritmo del equipo de Xavi

Robert Lewandowski pone autocrítica a su mal 2023. Desde que volvió del Mundial, el delantero polaco jugó 48 encuentros con la camiseta del Barcelona en los que marcó solo 24 goles. Un gol cada dos partidos, una media muy inferior a la lograda a lo largo de su carrera. Su mal rendimiento, que está teniendo continuidad en este 2024, ha acabado afectando los resultados del Barcelona y, como consecuencia, la decisión de Xavi.

El Barcelona es, esta temporada, el equipo de Europa con peor ratio de ocasiones/goles marcados. Y gran parte de ello es que el goleador al que se fichó como estrella del equipo azulgrana ha sufrido un bajón de dimensiones considerables hasta el punto de discutirse su continuidad en el FC Barcelona. Incluso se llegó a contemplar la posibilidad de una salida a Arabia Saudí en este mercado de invierno que ayer cerraba, una opción que hubiera dejado al Barça más tocado aún de lo que está, con solo Vitor Roque en ataque. Su bajón ha coincidido con la del equipo de Xavi.

El polaco admite, en un ejercicio de autocrítica, que entró en un pozo del que le fue complicadísimo salir (¿Ha salido?) para acabar elogiando en esta conversación con periodistas polacos la grandeza de Pep Guardiola, a quien tuvo en su etapa en el Bayern Munich. La admiración por el técnico catalán contrastan con las informaciones que salen del vestuario que no comparte el mismo nivel que su opinión de Xavi Hernández. 

En su afán de revertir la situación, el propio Lewandowski montó una comida en su casa el día después del anuncio del técnico de Terrasa, una conjura que bien podía haberse celebrado con anterioridad, para aunar fuerzas para salir del espiral negativo en el que se encuentra el equipo y para intentar ganar ya sea la Copa, la Supercopa o la misma Liga. Pero no. La reunión se hizo para que mirar adelante no sea una duro pesar, quizás para salir del pozo ahora que Xavi Hernández ya tiene data de caducidad.