Opinión

Lewandowski, fichaje del rendimiento inmediato

Lewandowski regresa al Camp Nou en Liga

Lewandowski regresa al Camp Nou en Liga / Valentí Enrich

Robert Lewandowski ha cumplido esta semana sus primeros 200 días como jugador del FC Barcelona. Es el fichaje de mayor renombre efectuado este verano y el que mayor rendimiento está ofreciendo. Sus 14 goles en Liga suponen una media de 0.8 goles por partido. Esto quiere decir que va camino de acabar la Liga con 30 tantos, una cifra inferior a los anteriores pichichis de la competición o lejos de la actual carrera por la Bota de Oro, pero nada despreciable y claves para que el Barça sea el favorito número 1 para ganar la competición.

La adaptación de Lewandowski planteaba algunas dudas: ya sea por la edad o por jugar de delantero centro clásico cuando el Barcelona, durante muchas etapas, no lo ha precisado. Y, sobre todo, porque venía a ocupar el espacio que supuso la marcha de Leo Messi. No por lo que hace referencia a su posición en el campo sino por convertirse, desde el minuto 1, en la estrella que precisaba el equipo.

Lewandowski ha cumplido con creces por el rol por el que ha sido fichado. Y, no solo eso, sino que ejerce de contrapunto en un equipo plagado de jóvenes jugadores. Él, Busquets o Jordi Alba, son decisivos para que exista este equilibrio tan preciso para que un equipo sea consistente.

Lewandowski, además, es el punto de unión en un nuevo clan que ha nacido en el vestuario con la presencia de De Jong, Ter Stegen o Christensen, todos ellos de carácter más nórdico que los nacionales. No solo ellos se llevan bien, sino que sus esposas o compañeras también forman un grupo que se ve con asiduidad, se juntan para cenar o para hacer grupo.

Lewandowski es un fichaje de rendimiento inmediato que cumple con creces para lo que fue contratado. Y eso que sufre el hándicap de estar en un equipo que todavía tiene carencias ofensivas. Si bien en defensa está espectactular, en ataque no va sobrado de ocasiones porque no todos los extremos le nutren de balones para que él pueda acabar decidiendo dentro del área, donde realmente hay pocos de su nivel.