Con Jordi, todo empieza a tener más sentido

Jordi Cruyff, una vida azulgrana

Jordi Cruyff, una vida azulgrana / VALENTÍ ENRICH

Albert Masnou

Albert Masnou

Empieza el segundo mercado de la era Laporta con mayores expectativas que el primero donde, a grandes rasgos, se fichó lo que estaba planificado (Eric, Agüero y Memphis) y se añadió a Luuk De Jong. Y se abrió la puerta a Junior, Trincao, Pjanic, Mattheus, y a Messi y a Griezmann. El cambio permitió rebajar la masa salarial pero desequilibró por completo al equipo, que se quedó seco, sin gol.

La configuración definitiva la plantilla fue una condena para Koeman quien, desde hacía meses, ya no contaba con Ansu, el mejor goleador, lesionado. Los errores de planificación supusieron un castigo para el técnico holandés y... para el equipo, que quedó fuera de la carrera de la Liga y eliminado de la Champions. Ha sido un tiempo perdido en el que solo cabe destacar el florecimiento de algunos canteranos.

El segundo mercado, decíamos, se abre la semana que viene con mayores expectativas pues los cantos de sirena que nos llegan suenan mucho mejor y nos permiten vislumbrar un equipo más compensado que el anterior. Las decisiones tomadas son rotundas y los nueve jugadores que están en la rampa de salida son una muestra de lo desajustada que ha encontrado la plantilla Xavi... y Jordi Cruyff.

El hijo de Johan, que no quiso entrar en el club hasta el 1 de septiembre para ser responsable de sus decisiones y no corresponsable de las de otros, ha tenido un papel discreto desde que llegó, alejado de los focos.

Primero ayudó a Koeman en todo lo que pudo y ahora se ha convertido en un referente para Xavi, en su mano derecha, y en cabeza pensante en la reorganización deportiva del Barça. Con Jordi, todas las decisiones empiezan a tener una sentido futbolístico y Mateo Alemany, duro como pocos en las negociaciones, se está convirtiendo en el brazo ejecutor de esta nueva idea que se impone en el club, con una parcelación de las tareas en función de las virtudes de cada uno.

Pocos conocen como Xavi y Jordi Cruyff, por la historia que acarrean tras de sí y el conocimiento acumulado, el verdadero camino que debe tomar el Barça. Y nadie mejor que ellos para llevar a cabo esta transformación en la que, no lo duden, la Masia será pieza angular. Pero toda plantilla precisa de piezas a buscar fuera y ellos sabrán encontrarlas.

Será apresurado vender la piel del oso antes de matarlo pero el Barça se está adentrando en un bosque con altas probabilidades de éxito y empezar a cambiar el sino en el que está inmerso desde que las decisiones se tomaron bajo un prisma político y económico. Y no deportivo.