A lo nuestro (y a mucha honra)

Entrenamiento de la selección española femenina

Entrenamiento de la selección española femenina

Carme Barceló

Carme Barceló

Que la risa va por barrios es tan verdad como que hoy es miércoles y mañana, jueves. Del amor al odio hay un paso y de la risa al llanto, otro. Uno de los que se lo está pasando de cine desde hace unos años es Kylian Mbappé. Su última aparición pública -vía redes sociales, como no podría ser de otro modo- son unos emoticonos tronchándose del tuit de su amigo y jugador de la NBA Antetokounmpo, que publicó una foto acompañada de este mensaje: “Al Hilal, podéis ficharme: me parezco a él”.

Así se escribe la historia de los cracks actuales, vive Dios. Uno de los mejores jugadores del mundo actual que se ríe del que le paga y de los que le pueden pagar. La historia de Mbappé empieza a ser ya no sólo cansina sino pesada e, incluso, desagradable. Me cuesta imaginar a ese Florentino Pérez ‘tranquilo’, tal como dijo en su día en ‘El Chiringuito de Jugones’ y que, según los altavoces madrileños, sigue vigente. Un empresario como él, con un palco como el suyo (hilos incluidos) y una agenda que se equipara o supera a la muchos jefes de estado parece estar en manos de un futbolista, su entorno y sus vaivenes. Casi cinco años lleva vigente la historia de amor -“mi sueño desde niño es jugar en el Real Madrid”- y de desamor -ahí te quedas que aquí me quedo (Macron-Francia-PSG)- desde que Zidane contactó con el chico y su entorno allá en Mónaco. Insisto. No reconozco a este FP de perfil bajo ante lo que yo considero una provocación constante.

Por si no fuéramos pocos, parió la abuela. Sin comerlo ni beberlo, el Barça se vio este lunes implicado en el ‘culebrón’. Que a Laporta le va la marcha ya lo sabemos. Pero de ahí a jugar este partido media un abismo. Espectadora de lujo, la entidad azulgrana ha visto como el Paris Saint Germain la ha utilizado y colocado en el terreno de juego. El club francés quiere que el Real Madrid mueva ficha rápido y se ha servido del eterno rival. Si pretendían con ello poner nervioso al presidente blanco, ahí dan con hueso. Una maniobra burda que despertó otras risas y no precisamente las de Mbappé. Aunque, visto lo visto, igual le hizo hasta gracia.

A LO NUESTRO viendo el panorama a seiscientos kilómetros, mejor nos quedamos con lo que tenemos, que no es poco. Títulos de Liga masculino y femenino, Champions Femenina y unas secciones que siguen sumando valor al club. Veo a todo un campeón de Europa como Gündogan feliz de haber llegado al Barça y no puedo evitar pensar que, para algunos, sigue siendo más importante la historia que el dinero. Arabia Saudí no ha convencido ni a Messi, ni a Busquets ni a Jordi Alba. ¿Lo conseguirá con Kilian Mbappé, al que le han hecho la oferta más mareante del mercado? Poco probable pero no imposible.

A lo nuestro. Y a desayunar mañana a las 9.30h con la MVP del primer partido de la selección española del mundial, que es blaugrana, de Ribes y se llama Aitana. A disfrutar con la doble balón de oro que es del FC Barcelona y responde al nombre de Alexia. A aplaudir a Irene Paredes, a Mariona Caldentey, a Salma Paralluelo, a Ona Batlle, a Cata Coll, a Laia Codina, a Geyse, a Lucy Bronze, a Keira Walsh, a Caroline Graham Hansen, a Ingrid Engen y así hasta las dieciocho jugadoras azulgrana que participan en esta competición. Y también a Mapi León, Patri Guijarro y Claudia Pina. Sus principios no son de risa. Todo lo contrario.