Hay que quitarse el sombrero con Carlos Sainz

Este jueves asistimos a una etapa más de la guerra entre los tres pilotos que se van a disputar el triunfo en el Dakar 2020: Carlos Sainz, Nasser Al-Attiyah y Stéphane Peterhansel. Esta batalla se ha traducido en unas imágenes imborrables de los tres persiguiéndose dando un auténtico espectáculo de como hay que pilotar.

‘Monsieur Dakar’ es quien más experiencia tiene por sus Dakars ganados en moto y coche; el señor Al-Attiyah lucha por una cuestión de honor ya que ganar en la península arábica significa mucho por su país, Catar; pero quien tiene un mérito impresionante es Carlos Sainz.

El piloto madrileño ha hecho un magnífico trabajo con su coche. El año pasado tuvo un grave problema rompiendo el tren de la suspensión y perdió muchas horas hasta que llegó al asistencia. Otro hubiera abandonado y se hubiera marchado para casa, en cambio él se quedó para probar mejor el coche. 

La ilusión de Carlos

Sainz sabe que donde mejor se prueban los autos es en las carreras. Hizo la segunda parte de la carrera para conocer mejor su Mini y después ha hecho una montón de kilómetros tanto en Marruecos como en el campo militar de San Gregorio de Zaragoza e incluso insistió en hacer hacer una carrera en Arabia Saudí de tres días. Ha tenido una magnífica preparación física y todo este trabajo tiene su fruto.

Evidentemente después pueden haber averías mecánicas, pérdidas del rutometro y mil historias del Dakar, pero si has trabajado mucho los frutos salen. Tener esta ilusión con 57 años de preparar y evolucionar el vehículo solo lo hacen unos elegidos. Son muy pocos los que tienen esta ilusión y este criterio de evolución del coche. Nos tenemos que quitar el sombrero ante gente de este tipo como es Carlos Sainz.

Creo que incluso Peterhansel se aprovecha un poco del trabajo de Carlos. Tiene mucha experiencia, pero por mucho que intentara evolucionar el coche no lo haría tan bien como el Carlos, eso seguro.