El gran reto de monetizar el fútbol femenino

El público copó las gradas del Camp Nou

El público copó las gradas del Camp Nou / EFE

Marc Menchén

Marc Menchén

El fútbol femenino ha arrancado este año su primera temporada con la condición de profesional. Todo un desafío que arranca con una inversión público-privada de 13,3 millones de euros anuales entre el Gobierno para que se potencien estructuras, Dazn-Mediapro para garantizar una ventana audiovisual y LaLiga, que ha asumido el reto de la comercialización. Las bases están sentadas, y tan solo falta conocer cuánto más está dispuesto a destinar el aficionado como consumidor de la renombrada Finetwork Liga F o la Women’s Champions League. Junto a las audiencias, los ingresos por taquilla serán el auténtico termómetro del crecimiento del futfem como producto de entretenimiento.

Por varias razones. La inversión canalizada a través del Consejo Superior de Deportes (CSD) no busca retorno y tiene un claro componente de promoción, mientras que televisiones y patrocinadores invierten entre una mezcla entre convencimiento de que esto tendrá un retorno positivo y convicción de que es el momento de apoyar el desarrollo de las disciplinas. Por el contrario, un aficionado de a pie sólo comprará abonos, entradas o merchandising si realmente está convencido.

Y aquí cobra muchísima importancia como laboratorio de pruebas el movimiento estratégico del FC Barcelona con la Champions. El club ha apostado nuevamente porque sus encuentros contra FC Bayern y FC Rosengard pasen del Estadi Johan Cruyff al Spotify Camp Nou. Eso sí, con un cambio sustancial. La temporada pasada se batieron todos los récords mundiales de asistencia al fútbol femenino con 91.648 espectadores, pero ese hito se produjo porque nadie tuvo que pagar por su entrada. Esta vez no será así. Las entradas que se han puesto a la venta tienen un precio simbólico de entre 6 euros y 26 euros, ni de lejos ajustado a su valor real, pero un stopper económico suficiente para medir el grado de madurez del fútbol femenino como negocio. Sólo con obtener llenar la mitad de los asientos, la recaudación podría situarse en más de 600.000 euros.

Por el momento, los partidos del Barça en el canal de Dazn en Youtube se acercan e incluso superan las 100.000 reproducciones, mientras que en los partidos como local no está llegando al lleno. Según el presupuesto para 2022-2023, la junta directiva de Joan Laporta confía en que la sección sea capaz de facturar 1,99 millones de euros por taquilla, y cumplir esa cifra exige por la respuesta del público. O más bien, a que pase por caja.