El futbolista Gerard Piqué

Gerard Piqué, un clásico del FC Barcelona

Gerard Piqué, un clásico del FC Barcelona / David Ramírez

Alfredo Martínez

Alfredo Martínez

Alto, bien parecido, rico, y dicen, que con un coeficiente intelectual muy superior a la media. Vamos, el perfil digno de envidia. Y encima jugador de fútbol profesional y en el club de sus amores y orígenes. Y encima casado con una de las cantantes más famosas del mundo. ¿Quién no quisiera ser Gerard Piqué? Futbolista de día, empresario de noche, o viceversa.

¿Qué le mueve a Piqué a seguir jugando al fútbol y habiéndose rebajado el sueldo considerablemente este verano? A veces le insultan en muchos de los campos, sufrió una durísima campaña cuando defendía la camiseta de la selección española. ¿Le merecía la pena? Acaba de cumplir 35 años y está inmerso en muchos proyectos profesionales que compagina con su dedicación al fútbol profesional. Y sigue en la brecha. Es uno de los centros de muchas de las críticas que reciben los jugadores del Barcelona en los últimos tiempos y muchos le señalan como partícipe en los grandes fiascos deportivos que ha sufrido la entidad en los últimos tiempos junto a las otras vacas sagradas. Tiene muchos detractores, quizás más que defensores, porque el tiempo acaba desgastando a casi todos o a todos.

Sé que a la mayoría de los que leen este artículo o hablan sobre Piqué no les deja indiferente. Se posicionan claramente. No hay un término medio con el central de la Bonanova. Le aceptas y admiras o le rechazas y no crees que tenga recorrido en el Barcelona. Pero es él el dueño de su destino y de su futuro futbolístico.

Un tipo que ha sido capaz de atraer al club, con sus contactos, al patrocinador principal durante varias temporadas como fue el caso de Rakuten con lo que implica de ayuda al club. No es un futbolista al uso, en eso estaremos casi todos de acuerdo.

Ha sabido compaginar su vida extra deportiva con la futbolística, le pese a quien le pese. Es un jugador que se ha cuidado y que mantiene un físico acorde a la élite a su edad.

Se acerca el final de su carrera deportiva y, a buen seguro que también generará multitud de debates el momento de su adiós al Barcelona.

Y ahí sigue Piqué, inasequible al desaliento. Compitiendo y tratando de demostrar que aún tiene la ilusión suficiente como para ponerse la camiseta del Barcelona cada semana.

Acaba de superar a su gran ídolo y amigo en el top-5 de los jugadores que más veces han vestido la sagrada túnica azulgrana. Ya son 595 partidos, En breve la friolera de 600 partidos que debe alcanzar en las próximas semanas, se dice pronto.

¿Qué le mueve aún a Piqué a seguir motivado en el club? Es evidente que no debe ser por dinero, aunque a buen seguro que ayuda.

Lo que sí parece claro, y es de justicia, que Piqué se ha ganado el derecho a elegir como y cuando dejará el Barcelona, igual que ocurriera con la selección española en plenitud de facultades y con un palmarés envidiable. Como el que ha cosechado en el Barça.