Exhibición del Barça más maduro y sólido

El Barça ofreció un recital de juego colectivo y solidario frente al Villarreal en una primera parte donde rayó a gran altura. Las ayudas defensivas fueron una constante en medio de un ritmo intenso y con una presión brutal. En un equipo en el que a veces se habla en exceso de individualidades, ayer se vieron más ‘parejas de baile asociativas’ que nunca. Otro de los tópicos que el equipo de Xavi enterró en La Cerámica fue el de la especulación. El equipo sorprendió con su intensidad y pases en largo, empezando por Ter Stegen.

En cuanto a nombres propios, dejando a un lado las genialidades de Pedri, atención a Frenkie de Jong realizando otro gran partido y muy bien arropado por un Kessie que fijó mucho más su posición.

En el Villarreal, Setién optó por poblar el centro del campo viendo el déficit ofensivo que tenía por las bajas.

infranqueables La solidez del bloque se prolongó durante todo el encuentro. Un dato digno de tener en cuenta: el Barça solo concedió la ocasión del Comandante Morales en el primer tiempo. A partir de ahí, solidaridad total con mención específica para los dos centrales. Christensen sigue creciendo a pasos agigantados, pero Araujo firmó otro capítulo especial en un partido de lo más redondo.

Volver a incidir en la aportación de un Kessie que se movió muy bien con el balón en los pies. Además de guardar posición, no se le computaron pérdidas peligrosas.

Tres puntos importantes los sumados frente al Villarreal. 

Es cierto que el Real Madrid debe compensar el partido midiéndose al Elche, pero 11 puntos de diferencia en la clasificación son muchos y permiten afrontar el calendario con notable tranquilidad. Todo lo contrario que el conjunto de Ancelotti, que puede acusar el triunfo del Barça en una de sus salidas a priori más delicadas en lo que resta de Liga.