"No eres entrenador hasta que no te echan"

El Barça recupera la alegría con Xavi

El Barça recupera la alegría con Xavi / Valentí Enrich

Javier Giraldo

Javier Giraldo

"No eres un entrenador de verdad hasta que no te echan por primera vez". La frase es del mítico entrenador inglés Malcolm Allison, que entró y salió de muchos banquillos a lo largo de sus 30 años como técnico.

Sus palabras simbolizan a la perfección la fragilidad de los entrenadores, que suelen tener de todo menos tiempo para trabajar. Ojalá Xavi sea la excepción y pueda construir con tiempo un proyecto a largo plazo, con más estabilidad que presión. Pero esto es el Barça y aquí las urgencias están a la orden del día.

Sería fantástico que Xavi tuviera el margen de maniobra que no tuvieron otros -a Koeman se le empezó a machacar demasiado pronto y luego él no supo o no pudo plasmar en el campo lo que le pedía la afición- y que pueda pensar más en el futuro que en el presente

También sería deseable que los ánimos del entorno se templasen un poco: últimamente da la sensación de que las filias y fobias se han exacerbado tanto que los análisis moderados y equilibrados se diluyen como azúcar en el café.

Más que religiones, parece que haya sectas: los fieles se vuelven fanáticos y los herejes reniegan de todo y a todas horas. Un poco de moderación y sosiego no vendría mal, tanto a la crítica periodística como a los trovadores de las redes sociales. 

Un día para recordar

Xavi se estrena hoy, y pase lo que pase en el Estadi, convendría recordar que Guardiola empezó su andadura en el Barça perdiendo en el campo del Numancia. Una semana después, empató con el Racing. Algunos ya lo querían destituir después de dos partidos, pero se impuso la cordura. El resto es historia. Xavi empieza hoy a escribir la suya. Déjenle que lo haga con tiempo. No le agobien con aplausos o silbidos desde el minuto uno.