En enero, Vitor Roque y alguno más

Vitor Roque será jugador del Barça a partir del 1 de enero

Vitor Roque será jugador del Barça a partir del 1 de enero / SPORT.es

Joan Mª Batlle

Joan Mª Batlle

Más allá de las circunstancias en las que se produjo el empate del Barça en Granada, la más grave el gol mal anulado a Joao Félix que hubiera dado in extremis los tres puntos, lo que quedó absolutamente claro y debe ser motivo de reflexión e inmediata solución es que la plantilla es muy corta y que así será muy difícil lograr títulos.

Deco y Xavi eran conscientes de ello, pero no podían imaginar la plaga de lesiones que ha asolado al equipo en el inicio de temporada. Pedri, De Jong, Raphinha, Lewandowski, antes Araujo, ahora Koundé y Lamine Yamal, son los afectados, varios de ellos bajas de mediana o larga duración. El banquillo de Granada estaba repleto de jugadores del filial y en una situación límite, Xavi solo pudo hacer tres cambios y seguramente no los deseados. La cuestión es que nuevamente se ha puesto de manifiesto que entre los titulares y los suplentes hay mucha diferencia. Las rotaciones no funcionaron en Mallorca y las bajas fueron decisivas en Granada. Total, cuatro puntos menos.

FICHAJES DE INVIERNO


Hasta el mercado de invierno, habrá que cruzar los dedos para que los lesionados se recuperen bien y, a la vez, no haya más contratiempos físicos. El asunto es grave porque las lesiones de larga duración requieren luego un mínimo de readaptación al equipo y casos como el de Pedri son especialmente preocupantes porque el canario solo ha jugado dos partidos. No hay otra solución que ir al mercado de invierno para dotar a Xavi de un fondo de armario competente, pero tampoco será fácil. El límite salarial asfixia y alguna palanca se ha atascado. Pero no hay otro remedio.

Vitor Roque es innegociable. A la espera de que su lesión, ¡otra más incluso lejos del equipo!, no sea un obstáculo, el delantero brasileño no puede retrasarse ni un minuto más allá del año nuevo. Lewandowski no tiene sustituto, un especialista goleador como él, y hoy en día ir sin un killer por la vida es un suicidio. Y no debería quedarse ahí la cosa. Otro centrocampista, si puede ser un mediocentro que acabe con las dudas, y un defensa, visto lo poco que cuentan Iñigo y Marcos Alonso, también serían convenientes.